Ábalos no descarta que el PSOE incluya ERC o PNV en la Mesa de la Cámara

José Luis Ábalos ha afirmado que «lo normal» es que el PSOE ocupe la Presidencia del Congreso, tal y como han decidido los ciudadanos al otorgarles la condición de partido mayoritario. Lo que no ha confirmado, ni descartado el secretario de organización es si el partido socialista cederá algún puesto en la Mesa de la Cámara a partidos como ERC o el PNV.

Así lo ha señalado el también ministro de Fomento en funciones en el Congreso, donde ha acudido a presentar sus credenciales como diputado y a hacer todos los trámites para poder tomar posesión de su escaño el próximo día 21 de mayo cuando se constituya la nueva Cámara Baja.

«Nosotros somos partidarios de que la Mesa integre a la pluralidad de la Cámara», se ha limitado a responder Ábalos cuando se le ha preguntado sobre la posibilidad de que hagan hueco en la Mesa a partidos de corte nacionalista o independentista.

El dirigente socialista ha alegado que no podía dar información sobre ese extremo porque es la portavoz del grupo en el Congreso, Adriana Lastra, la persona encargada de pilotar las negociaciones relativas a la Mesa de la institución.

CALVO, UN «PILAR» DEL GOBIERNO

Lo único que ha dejado claro es que «lo normal» es que el PSOE, como fuerza mayoritaria se haga con la Presidencia del Congreso. La única ocasión en la que la Cámara ha estado presidida por una persona de un partido distinto al ganador de las elecciones fue en la conocida como ‘legislatura corta’ de 2016, cuando el socialista Patxi López llegó a la Presidencia gracias a un acuerdo con Ciudadanos, pese a que el PP era el partido con más escaños.

Respecto a la posibilidad de que la vicepresidenta en funciones, Carmen Calvo, sea propuesta por el PSOE para ocupar la Presidencia, Ábalos ha recalcado que su compañera es «un pilar importante» en el Gobierno y que, aunque no le corresponde a él tomar esa decisión, desde su punto de vista, las «especulaciones» que apuntan esa opción «no tienen ningún fundamento».

En relación a su propio futuro, el ministro ha señalado que él está «encantado» de haber estado al frente de Fomento y que está «a disposición» de Sánchez para tome la decisión que considere oportuno respecto a su persona.

ALGUNO VA A LLEGAR «DESFONDADO»

Además, ha aprovechado para hacer una «apelación a la centralidad», entendida no como una «ideología» sino como un «espacio de convergencia», y ha llamado a acabar con la «crispación». «Es el momento de estar a la altura», ha remachado.

En este contexto, ha hecho hincapié en la necesidad de que todos los partidos asuman que España «tiene una pluralidad política con la que hay que trabajar». «Para dar estabilidad al país hay que integrar esa pluralidad», ha defendido, lamentando, en referencia a Ciudadanos, que haya formaciones que aún no se hayan dado cuenta de ello.

En este punto, ha lanzado una advertencia a quienes, desde su punto de vista, se creen que la legislatura es «una carrera de cien metros», cuando en realidad es un «maratón». «Hay quien se va a desfondar», ha avisado, a la vez que ha pedido que se abandonen las «descalificaciones» para poder hacer un debate político «que prestigie» y «honre» a sus protagonistas.