Junqueras asegura tener una relación «cordial» con Puigdemont y hablan varias veces por semana

El líder de ERC y exvicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, ha asegurado que habla de todo y frecuentemente con el expresidente Carles Puigdemont, «una, dos, tres veces» a la semana, y que la relación es cordial.

En una entrevista de TV3 recogida en el primer fin de semana tras recuperar el tercer grado penitenciario, ha negado así que no se hablen, porque ahora hay que priorizar Catalunya, tanto por el proceso soberanista como por la crisis del coronavirus.

En cuanto a la relación entre los propios presos del 1-O, ha respondido que es una relación cordial, de compañeros de módulo y de personas que han convivido mucho, y «nunca ha habido ningún enfrentamiento».

También ha dicho que confía en el recorrido de su caso en la justicia europea, aunque, en todo caso, ha insistido en su convencimiento de ser una persona buena y honrada.

Además, está «orgulloso» de ir a la cárcel por sus ideas, ha dicho, pese a la dureza de la cárcel, y ha constatado que ha recibido muchas muestras de apoyo del resto de presos en general, y en la cárcel se ha sentido fuerte y sereno, ha añadido.

Al preguntársele si volvería a actuar igual, ha respondido que trabajará por el bien de la sociedad: «Haré aquello que nos mueve por la gente; claro que sí».

Al repreguntársele, ha reiterado que lo que se hizo era «fruto de un mandato democrático, de un mandato electoral», y que ya lo dijo así en el juicio.

Sobre su vida en la cárcel, ha negado que en las cárceles catalanas tengan un trato de privilegio ni él ni el resto de presos del 1-O; y ha comentado que en la cárcel de Estremera pudo conocer al excomisario Villarejo –«saludarlo; dejémoslo así»–.

Sobre el libro que Puigdemont presentará este lunes y otros que han publicado presos del 1-O, Junqueras ha dicho que cuando él mismo quiere opinar de la actualidad ya lo hace con artículos periodísticos.

Aun así, en la cárcel durante el confinamiento ha escrito mucho, de manera que ahora ultima «entre cuatro y cinco» libros sobre temas variados, incluida la prisión.