Algo muy extraño ocurrió en un receso durante un juicio por el ‘caso Scándalo’ en Málaga, en el que hay 21 personas involucradas acusadas de proxenetismo. En un espacio de 10 minutos en el que no había nadie en la sala, alguien cubrió el micrófono del fiscal con un preservativo.
El fiscal contempló la escena horrorizado, y no dudó en presentar de inmediato una denuncia en el Juzgado de Instrucción número 7 de la provincia andaluza. En el documento legal expresa la «contrariedad» que sintió al protagonizar el incómodo momento, y reconoce no saber «quién y cuándo» fue el condón emplazado en el micrófono. El fiscal también añadió a la denuncia unas tres fotografías del preservativo.
Fue el pasado viernes, entre las 14.30 y las 15.15 del mediodía cuando alguien aprovechó la salida de los jueces de la sala para ejecutar la maniobra. Al acabar el juicio, el magistrado contó lo ocurrido al Auxilio Judicial y al tribunal, quienes expresaron un gran malestar frente al suceso, según recoge DiarioSur.
NADIE VIO AL VÁNDALO DEL CONDÓN
Hasta el momento, todos los presentes negaron haber visto al culpable, por lo que su identificación resulta complicada.
Todo esto ocurría en contexto del ‘caso Scándalo’, una trama que pide responsabilidades a 21 personas, empresarios y regentes de clubes nocturnos de Málaga, Córdoba y Torremolinos. Los 167 delitos de los que se les acusa suman casi 4.000 años de prisión, incurriendo proxenetismo y prostitución. El proceso se reactivó un mes atrás, siendo paralizado durante la pandemia de coronavirus.
En el primer día de toma de declaraciones, los acusados alegaron que sus locales no eran «clubes de alterne, sino hoteles en los que las chicas eran huéspedes». Uno de ellos incluso defendió que lo que hicieron es «rescatar» a algunas chicas, y «las llevaron a un convento«.
