Inspectores de Educación piden «un acuerdo responsable» para «una educación segura»

USIE (Unión Sindical de Inspectores de Educación) ha expresado este lunes su exigencia a los representantes de los docentes y a la Consejería de Educación para que alcancen «un acuerdo responsable para un adecuado inicio de curso» en la Mesa Sectorial Extraordinaria de Educación, que se celebra este martes.

«El único objetivo debe ser velar por una educación segura y ordenada dentro de lo posible, teniendo en cuenta el principio de realismo e incertidumbre que hace inviable, soluciones mágicas ante situaciones inverosímiles», han expresado los inspectores de Educación por medio de una nota.

A juicio de USIE, «la escuela virtual es la antiescuela, por lo que hay que garantizar la presencialidad, siempre con la máxima seguridad y atendiendo a las medidas higiénicas y sanitarias que en cada momento establezcan las autoridades sanitarias», por lo que han advertido de que las partes deben ser «conscientes de que habrá problemas y dificultades como en cualquier otro sector y escenario».

«No nos queda otra», han argumentado los inspectores de Educación, quienes han sostenido que «todas las partes debemos hacer esfuerzos y generosas cesiones ante el mayor problema educativo de los últimos 40 años».

En el caso de la Administración, USIE ha reclamado que «debe redoblar los recursos materiales y humanos: docentes, personal de administración y servicios (PAS), personal de atención educativa complementaria (PAEC) y personal de limpieza para los más de 1.142 centros públicos de ESO y Postobligatoria y 155 centros de Enseñanza de Régimen Especial».

Los inspectores, que han demandado que «la sensatez y el principio de realismo se antepongan a otro tipo de intereses», han abogado por el hecho de que «La Junta, los Ayuntamientos, los docentes y las familias tenemos que coordinarnos y dar lo mejor de nosotros mismos».

Los inspectores de Educación han apuntado que «los directores de los centros, en su calidad de representantes de la Administración educativa, tienen que, aceptando ese rol inherente a su cargo, organizar sus centros de la mejor manera posible evitando alarmismos sociales y coordinando eficazmente a todo el personal bajo su mando».

Para las familias han pedido que «deben colaborar sin excusas con los profesores y confiar en la profesionalidad de los docentes».

En el caso de «los 786 Ayuntamientos andaluces tienen la imperiosa, necesaria y urgente obligación de potenciar los servicios de limpieza y mantenimiento de los 2.000 colegios públicos de educación infantil y primaria».

Mientras que sobre su propia responsabilidad en el inicio de curso, los inspectores de educación han esgrimido que «debemos centrar nuestros esfuerzos en acompañar, ayudar y comprender las difíciles situaciones en las que se verán involucrados todos los sectores de la comunidad educativa».

USIE ha esgrimido que «en la actual coyuntura, el asesoramiento debe ganar peso ante la supervisión pues nos encontramos ante una situación transitoria y compleja. Los planes de inspección deben simplificarse al máximo para que se puede atender lo realmente necesario e importante».

«Tenemos la obligación ética de intensificar los escenarios de negociación con todos los interlocutores: familias, organizaciones profesionales, sindicatos, y ayuntamientos a la hora de plantear un adecuado retorno a las aulas en septiembre», han apostillado los inspectores de Educación.