Karlos Arguiñano sabemos que no tiene pelos en la lengua. No se mete nunca en polémicas políticas ni opiniones concretas sobre éste o aquel pero sí que suele opinar genéricamente y se moja bastante cuando le entrevistan. La última fue en el programa nocturno de La Sexta, ‘La Sexta noche’. El cocinero vasco volvía a acudir y no rehuía ninguna de las cuestiones de actualidad por las que le preguntaba el presentador, Iñaki López. Lo más destacado fue sin duda el duro mensaje que Arguiñano mandó a los políticos, indicando que no eran «los que necesitamos» y que muchos «no tienen ni estudios».
Arguiñano y el coronavirus
Obviamente se le preguntó sobre la situación de país debido a la pandemia del coronavirus. Karlos Arguiñano también fue claro y criticó la falta de acuerdo entre los políticos durante esta crisis. «La gente de a pie nos hemos desencantado», se lamentó. Arguiñano está especialmente sensibilizado con el sector de la restauración, como cocinero y propietario de restaurante que es. Insistió mucho en la clase política, indicando que «da la sensación de que hay un porcentaje elevado de los políticos que no están a la altura para estar en los puestos en los que están».
El cocinero vasco siguió haciendo también hincapié en la preparación de nuestros políticos, ironizando que «cirujanos no van a ser nunca».
Buenos y malos
Pero no sólo se habló de la situación en España, sino en el resto del mundo. Países como Estado Unidos o Brasil tienen incluso datos peores y una gestión igualmente polémica. Karlos Arguiñano reveló lo que le dice su mujer, Luisi. «Me mira y me dice: ‘Karlos, el mundo está fatal porque mandan los malos. Los buenos parece que nunca pueden llegar al poder'», contó Arguiñano, que se definió como «cocinero y padre de familia».
Un líder televisivo, y de opinión
Lo cierto es que Karlos Arguiñano es uno de los personajes televisivos más conocidos y queridos de nuestra televisión y sus opiniones siempre tienen peso. Ya forma parte de nuestras vidas y no ha abandonado sus programas de recetas de hace 28 años. Es un clásico. Pero también es un clásico en sus dotes de showman al margen del culinario. Sus disfraces, sus máscaras, sus marionetas, sus canciones, sus chistes y sus comentarios sociales y políticos a veces han provocado una gran polémica y malestar.
Arguiñano, como personaje tan público y famoso, ha sido objeto además de muchas acusaciones políticas y personales: machista, insensible, sin gracia… y siempre ha pedido disculpas si había molestado a alguien. Está claro que nunca se ha callado aunque no se ha metido personalmente con nadie y a lo largo de su carrera varias veces ha destacado por lo que ha dicho y cómo se ha comportado cocinando y no por sus recetas.
