Aguirre critica que PSOE baje «listón» de la educación: «No todos somos iguales»

La expresidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre ha criticado este lunes al PSOE por «bajar el listón» en la educación por su «afán de igualar» a todos los niños «en el mismo aula» pese a que tengan «diferentes aptitudes» y ha asegurado que «no todos» los alumnos son «iguales».

Aguirre, quien fue ministra de Educación y Cultura entre los años 1996 y 1999, durante el primer gobierno del ‘popular’ José María Aznar, ha defendido la «pedagogía» y la «atención personalizada» en la enseñanza. «Me parece muy importante la transmisión de conocimiento», ha dicho, al tiempo que ha acusado al PSOE de «despreciar la instrucción» y convertir la educación en un «aparcamiento de niños».

«El PSOE considera, en su afán de igualar que todos los niños estudien lo mismo dentro de la misma aula, sean cuales sean sus aptitudes, al final solo se puede conseguir si se baja el listón. Eso va en contra de la transmisión de conocimiento, que es muy importante», ha señalado Aguirre, que también ha asegurado que «los niños son diferentes» entre ellos y «no todos son iguales». En su opinión, existe una tendencia a «igualar por abajo» en la educación.

La exdirigente del PP ha reclamado que no se debe juzgar la educación pública «por el dinero que se invierte en ella, sino por los resultados» en «formación académica, en valores» y en ver «si ese colegio les va a ser útil» para la vida adulta.

‘LEY CELAÁ’: «RETROCESO PARA LA LIBERTAD»

Durante una intervención en la presentación del ‘Barómetro Schoenstatt. Educación, humanización y futuro’, elaborado por el colegio de Madrid Nuestra Señora de Schoenstatt con la colaboración del Instituto Sondea, Aguirre ha criticado la reforma educativa, conocida como ‘Ley Celaá’, es un «retroceso para la libertad de elegir» que la «Constitución concede a los padres». «La pública tiene más importancia que la concertada y privada», ha sostenido.

Además, ha lamentado que, a su juicio, la nueva ley educativa cierre los centros de educación especial y provoque la «angustia» a los padres que «en diez años» tienen que llevar a sus hijos a un «colegio ordinario».

«No llegará a hacerse real», ha deseado la exministra, que también ha afeado la eliminación de la «referencia de demanda social» a la hora de construir nuevos colegios. «Son ataques liberticidas», ha dicho Aguirre, que ha apuntado que la ‘ley Celaá’ tiene unos «aires totalitarios».