La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha afirmado que, con el traspaso de las competencias sobre las instituciones penitenciarias al Gobierno vasco, el presidente del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, «paga otra letra de su hipoteca» con el Partido Nacionalista Vasco (PNV) y con EH Bildu.
Así lo ha dicho Arrimadas en un mensaje en su cuenta de Twitter, en el que señala que esta «concesión», que se produce tras «el acercamiento masivo de etarras» a prisiones de Euskadi o próximas, «erosiona aún más la presencia del Estado en el País Vasco». «Una vergüenza», ha concluido.
En el seno de la Comisión Mixta de Transferencias, reunida este lunes en Bilbao, el Gobierno de España y el Ejecutivo vasco han sellado el acuerdo para el traspaso de las competencias sobre las prisiones, que será efectivo el próximo 1 de octubre, y han cerrado las transferencias del transporte por carretera, el código bibliográfico internacional ISSN y el edificio del Distrito Marítimo de Ondarroa.
También el vicesecretario general de Ciudadanos y portavoz de la Ejecutiva del partido, Edmundo Bal, ha criticado el traspaso de la gestión de los centros penitenciarios, pues considera que «no responde a ningún criterio de eficiencia técnica» y que solo es fruto de una negociación política.
AFECTARÁ AL CUMPLIMIENTO ÍNTEGRO DE LAS PENAS POR LOS ETARRAS
Además, ha indicado que en Euskadi acabará ocurriendo lo mismo que en Cataluña, donde la Generalitat, que también tiene transferidas las competencias en este ámbito, ha concedido permisos penitenciarios y pases al tercer grado a presos condenados por el proceso independentista de 2017 que luego han sido recurridos por la Fiscalía.
En el caso del País Vasco, cree que se generará «una mayor inseguridad en relación con el cumplimiento íntegro de las penas impuestas a los condenados por terrorismo».
