Fiscalía mantiene su petición de 30 años de condena para un acusado de agresión a las hijas de su pareja

La Fiscalía ha mantenido su petición de 30 años de condena para un hombre acusado de agresión sexual continuada a las dos hijas de su pareja, que eran menores de edad.

El juicio contra este individuo se ha celebrado este jueves a puerta cerrada en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra.

Al finalizar la vista oral, tal y como pedía inicialmente en su escrito de acusación, el representante del Ministerio Público ha ratificado su petición de pena de 30 años de cárcel para el acusado como autor de dos delitos de agresión sexual continuada a menores de 16 años.

Además, también solicita cinco años en libertad vigilada tras su salida de prisión y una orden de alejamiento que le impida acercarse a sus víctimas durante 17 años, para las que Fiscalía reclama una indemnización de 15.000 euros.

También pide que en la sentencia se le prohíba trabajar, de manera retribuida o no, en cualquier empleo que suponga un contacto regular y directo con menores durante tres años más a la pena de cárcel que se le imponga.

AGRESIONES EN 2015

El escrito de acusación redactado por la Fiscalía relata que los hechos se produjeron en un municipio del partido judicial de Porriño y comenzaron a principios de 2015, cuando el acusado convivía con su pareja, las dos hijas de ésta y un tercer menor, hijo biológico de él.

Los abusos se repitieron «con regularidad» hasta que en junio de 2016 una de las menores le contó a su madre los tocamientos que sufría por parte de este hombre y que, en alguna ocasión, le obligaba a hacerle felaciones. El escrito de acusación indica que el acusado pedía a sus víctimas que no dijeran nada «que no las iban a creer y que destruirían la familia».

Según sostiene el fiscal, año y medio después de los últimos episodios, una de las menores intentó quitarse la vida debido, según las psiquiatras que la atendieron, a una «sintomatología postraumática y ansioso-depresiva». En el instituto en el que estudiaba la niña se llegó a activar el protocolo de prevención de suicidios después de que ésta se autolesionase.