Las malas encuestas del PP hacen ‘salivar’ a Feijoo y Ayuso

Mientras que Pablo Casado, presidente del Partido Popular, está completamente pendiente de lo que haga o deje de hacer la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, hay otro dirigente del Partido Popular que se prepara para viajar a Madrid en 2023. El presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, es uno de los pocos, junto a la baronesa madrileña, que celebra el cambio de tendencia en las encuestas. Casado no juega a ganar o no las elecciones, sino a ganar la Moncloa. Y si no lo hace, el congreso para decidir un nuevo líder para el PP será una realidad imparable. Vox, según las últimas encuestas, gana terreno hasta el punto de que podría hacerse con más de 60 diputados. Y el Partido Popular, por primera vez en meses, refleja una cierta caída que, según comentan fuentes de Génova, hace que Feijoo y Ayuso se froten las manos. Es su oportunidad.

El caso de Ayuso es más evidente, pues tal y como aseguran desde su entorno, si Casado gana la Moncloa en 2023 se enterrará el proyecto que representa la baronesa madrileña. Pero Feijoo comparte el entusiasmo de Ayuso por la posibilidad de que se celebre un congreso para buscar renovar el PP de aquí a dos años. Las últimas encuestas publicadas reflejan una caída del Partido Popular que dejaría al partido con en torno a 100 diputados. Según la última encuesta de SocioMétrica publicada por el diario El Español, el PP se quedaría con tan solo 101 diputados frente a un PSOE que obtendría 100. Esto en cuanto a lo que dice esta empresa, pero hay otros sondeos que además de replicar este resultado, le añaden un aumento de unos cinco diputados a Vox. Y es en esta división de la derecha en la que se pierde la ambición de Casado y en la que empieza la de Ayuso y Feijoo: los dos grandes aspirantes a hacerse con el control del Partido Popular.

Feijoo juega con prudencia, pero Ayuso se ha lanzado un órdago. El haber hecho público y notorio el conflicto entre Casado y Sol por el PP de Madrid se ha convertido en una apuesta de todo o nada de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que o bien le dará la presidencia del PP si Casado pierde la Moncloa o bien la condenará a conformarse con la presidencia de la autonomía como techo político. Sin embargo, Feijoo ha jugado sus cartas con prudencia y su entorno asegura que el barón no descarta para nada un ministerio. Pero sea como sea, los suyos aseguran que Feijoo ha hecho hace tiempo las maletas para trasladarse a Madrid.

Este cambio de tendencia ha sido debatido en Génova. Algunos acusan a la guerra por el PP de Madrid de ser la causante de este cambio de tendencia del voto de la derecha. Otros insisten en que simplemente es fruto del liderazgo estéril de Casado y los hay negacionistas de los sondeos que no se creen lo que reflejan estas últimas encuestas. Pero lo cierto es que noviembre no ha sido un mes que haya gustado en el seno de Casado y que sí ha excitado los ánimos en Sol y en Galicia. Celebrar un congreso por el PP a nivel nacional dentro de dos años es un escenario que gusta, y mucho, a quienes consideran que Casado no puede ser el próximo presidente del Gobierno.

Los resultados de los sondeos se comentan en Génova, Pero más en Sol

Los resultados de los sondeos se comentan en Génova. Pero más en Sol. Estas encuestas que auguran un descenso de la intención de voto al Partido Popular se juntan a otra publicada por El Mundo de Sigma Dos que refleja que Ayuso solo crece en su territorio y que ya rozaría la mayoría absoluta con la punta de los dedos. Si se suman los dos resultados, el entusiasmo es la consecuencia directa más inmediata acompañada de ensoñaciones que colocan a Ayuso como candidata del PP para hacerse con la presidencia del Gobierno. Pero lo cierto es que es la primera vez que unas malas encuestas de un partido generan excitación en dos importantes regiones de España: la Comunidad de Madrid y Galicia, algo de lo que en Génova aseguran ser plenamente conscientes.

El caso de Feijoo es más prudente y tímido. El presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, se ha propuesto no llamar la atención para así poder rascar un ministerio si Casado llega al poder. Sin embargo, parece que el actual líder del PP no ha sido capaz en ningún caso de consolidar el crecimiento del PP dado que solo le ha durado cuatro meses (desde que Ayuso ganó las elecciones en la Comunidad de Madrid). Feijoo tiene asumido, y así se lo ha trasladado a su entorno, que él se trasladará más pronto que tarde a vivir a Madrid. Sobre si lo hará en calidad de ministro, de vicepresidente o de candidato del PP y líder de la oposición no se dice nada. Pero sobre que es inminente que Feijoo cogerá la carretera de La Coruña no hay dudas ni en su entorno más directo.

Tanto Ayuso como Feijoo se frotan las manos porque saben que Casado se hunde y apuestan a que no tiene la capacidad para dar un giro de 180 grados a las encuestas. El congreso por el PP está más cerca que nunca porque es la primera vez también que una victoria electoral no será suficiente para mantener en el cargo a Casado. Si no consigue la Moncloa, Ayuso y Feijoo estarán esperando a los cambios. Pero lo que está claro es que si no hay Gobierno conservador, más de uno se apresurará a enseñar la puerta de salida a un Casado cuestionado desde hace años.