Hace poco más de dos años, Bolivia vivió una crisis política y social sin precedentes. El golpe de estado, que acabó con el Gobierno de Evo Morales y dio paso al régimen de Jeanine Añéz, provocó una oleada de violencia en las calles bolivianas. Los Cuerpos y Fuerzas del Estado de Bolivia tomaron parte del conflicto y durante los días de protestas se vivieron episodios que atentaron contra los derechos humanos. Esta dramática situación que se vivió en el país Latinoamericano y que a día de hoy sigue teniendo consecuencias es lo que han denunciado estos tres testigos del régimen de Jeanine Añéz a MONCLOA.com
Ayben Guadanca es un enfermero que padeció en su piel la violencia suscitada durante las protestas que sucedieron al golpe de estado. Guadanca recuerda las calles de Bolivia esos días como un «campo de combate» en el que lamentablemente resultó lesionado cuando atendía a una persona herida. Asimismo, Ayben Guadanca recuerda cómo fue la actuación de las autoridades y asegura que «los policías fueron a matar» lamentando así que provocaran aún más violencia en las calles.
Por su parte, Nadesdha Guevara representa como abogada a las victimas de este trágico suceso. Guevara denuncia a MONCLOA.com los discursos de odio y racistas que tuvieron lugar durante la crisis y atentaron contra los derechos humanos de los bolivianos. Guevara recalca la violencia de los grupos paraestatales que participaron en el golpe de estado y denuncia las graves torturas a las que fueron sometidas las víctimas. Además, la letrada explica que Jeanine Añéz llega al poder «a través de una sucesión inconstitucional e ilegal con el respaldo de las fuerzas estatales».
Marisa Fernández reside en Madrid pero su propia familia sufre a día de hoy las consecuencias de esta violación de derechos humanos. «Hay mucha gente inocente que no tiene dinero para obtener su libertad» destaca Marisa a la vez que pide Justicia para lo que ocurrió durante el régimen golpista. «Queremos memoria, justicia y no repetición», pide con desconsuelo Fernández poniendo en valor el trabajo de la comunidad boliviana en España para denunciar estos hechos.
Los tres testigos de estos escalofriantes hechos se encuentran ahora en Europa para denunciar ante la ONU los delitos que sufrieron los bolivianos durante la crisis política de 2019. Su viaje por el viejo continente tiene como objetivo denunciar este abuso a los derechos humanos que sufrieron los bolivanos y que algunos de ellos aún siguen viviendo en su piel.
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