Los tatuajes han pasado a ser una moda muy minoritaria a una costumbre habitual, especialmente entre las generaciones más jóvenes, donde ya es más raro encontrar a alguien que no tenga al menos un tatuaje en alguna parte de su cuerpo. Es una opción estética y artística que le da a la persona que lo luce una personalidad y singularidad únicas. Se pueden hacer en cualquier parte del cuerpo, de cualquier tamaño y prácticamente de cualquier color, y el resultado dependerá de la creatividad del proyecto y la destreza del artista.
LA NORMALIZACIÓN DE LOS TATUAJES EN NUESTRA CULTURA
Hace pocos años los tatuajes estaban cargados de connotaciones negativas, y se asociaba a un pasado de criminalidad, violencia e incluso cárcel. Sin embargo, los artistas del tatuaje se han esforzado en romper este prejuicio, algo que se ha conseguido sobradamente. En parte gracias a las celebridades que los han lucido incluso en alfombras rojas, ayudando a normalizarlos como una opción estética aceptada y asentada en la cultura occidental.
