Las regiones de la UE piden apoyo para las zonas más dependientes de la industria del automóvil

Las regiones de la Unión Europea han pedido este jueves que se apoye a aquellas zonas y localidades con una mayor dependencia de la industria de la automoción en la transición hacia una movilidad sostenible y los vehículos eléctricos en sustitución de los de combustión.

«Muchas regiones dependen de la industria de la automoción, por lo que acelerar la transición verde implica invertir en la reconversión de mano de obra local. Esta transformación europea hacia la movilidad verde debe verse como una oportunidad, no como una carga para los gobiernos la industria y las personas», ha puesto en evidencia el presidente del ‘Comité de las Regiones de la UE (CdR)’, Apostolos Tzitzikosta, en un debate sobre el Pacto Verde y la movilidad inteligente en su sesión plenaria celebrada en Bruselas.

La comisaria de Transporte de la Comisión Europea, Adina Valean, ha apuntado que el Ejecutivo comunitario y los gobiernos nacionales pondrán en marcha programas de apoyo para que el impacto no sea negativo. «Estamos realizando muchos cálculos con colegas de la Comisión Europea para que los beneficios sean más que los problemas», ha indicado.

En este sentido, ha coincidido en el impacto que la transición a una movilidad sostenible tendrá en las regiones que cuenten con una importante industria de fabricación de automóvil, así como en su industria auxiliar: «hay muchas preocupaciones por su futuro».

Por su parte, la vicepresidenta del Banco Europeo de Inversiones, Lilyana Pavlova, ha instado en su intervención a poner en marcha una propuesta que observe a las regiones dependientes de la industria de la automoción, «con un acercamiento más holístico sobre la descarbonización».

En un paso más, Pavlova ha resaltado la necesidad de que se tenga en consideración cómo la descarbonización afecta a su PIB productivo. Además, ha recordado el impacto que tiene esta transición en la pérdida de puestos de trabajo directos e indirectos.

La comisaria ha recordado, a su vez, que el Ejecutivo comunitario ha planteado un final para los motores de combustión, si bien reconoce que sabe que es una cuestión en debate en muchos Estados miembros. «Para que las políticas tengan éxito deben mantenerse los puestos de trabajo y el futuro de una de las industrias más competitivas de Europa», ha resaltado.

INFRAESTRUCTURA DE RECARGA

Además, la responsable de Transporte ha pedido que se invierta primero en vehículos eléctricos y luego en la infraestructura de recarga, ante el debate abierto sobre si es necesario el despliegue de más estaciones de carga para acelerar la transición hacia la movilidad sostenible.

«Hay un dilema sobre si debemos tener más infraestructura de recarga: primero son los vehículos eléctricos y luego viene la infraestructura», ha expuesto Valean en un encuentro con el Comité de las Regiones.

En este sentido, ha explicado que Bruselas trabaja para solucionar este problema a través de la regulación de una infraestructura de combustibles alternativos que pretende establecer los objetivos «de desarrollo de infraestructuras públicas en las autopistas y en las ciudades».

«Nuestra propuesta para un Reglamento de Infraestructura de Combustibles Alternativos adopta un enfoque basado en el mercado, asegurando que tenemos las estaciones de recarga y reabastecimiento de combustible que necesitamos tanto para satisfacer esta demanda como para alentar a más personas y empresas a hacer el cambio a la electricidad o al combustible de hidrógeno», ha enfatizado la comisaria.

«Los objetivos basados en la distancia permitirán a los conductores viajar por la Unión sin ansiedad por la autonomía, mientras que los objetivos basados en la flota garantizarán que tengamos suficientes puntos de recarga, dejando a los Estados miembros y las regiones seleccionar las ubicaciones«, ha agregado Valean.

En este sentido, Valean ha apuntado que espera que la obligación de adoptar estaciones de recarga incremente el volumen de esta infraestructura y ha recordado que algunos Estados miembro están estimulando la transición a los vehículos eléctricos con fuertes paquetes de ayudas.