Podemos cree que la verdadera intención de Putin es acabar con los derechos LGTBI

Mientras los países y partidos políticos europeos se ponen sorprendentemente cada vez más de acuerdo y hacen frente común, dentro de los límites de las debilidades de la UE y de sus ideologías, contra la invasión rusa de Ucrania, una vez más Podemos e IU son el verso suelto. Se desmarcan no ya con análisis geopolíticos diferentes, sino con mensajes que, si no fuera por la dramática y preocupante situación, sería hilarante y daría para mil memes. La última ha tenido como protagonista una de sus máximos exponentes, Isa Sierra, que en un tuit no ha dudado en relacionar a Putin con la extrema derecha e incluir como siempre el asunto de género y LTBI.

La portavoz de Podemos colgó este pasado 28 de febrero un tuit que enseguida provocó un aluvión de comentarios, con especial mención a la respuesta del economista Daniel Lacalle y que compartió un usuario. Lacalle muestra la lista de la supuesta alianza de Putin (de claro pasado comunista) con la extrema derecha. Y es que Isa Serra se quedó a gusto, en medio de la que cae y donde debe de primar más que nunca la unión, con este texto: «La alianza de Putin con la extrema derecha en el mundo tiene como pilar la lucha contra el avance de los derechos de las mujeres y los derechos LGTBi.»

PODEMOS ESTÁ EN SU GUERRA

La formación morada sigue desmarcándose cada vez más del consenso general, por mucho que el Gobierno al que pertenecen con la coalición tenga una visión y opinión muy distinta. No obstante, lejos de moderarse y ser conscientes de la responsabilidad de formar parte del Gobierno y de la gravedad de la situación, va a más en sus declaraciones, en parte probablemente porque el PSOE, por miedo a que les retiren el apoyo (tanto de ellos como de los nacionalistas), más que censurarles les sigue en cierto modo, midiendo mucho las palabras y los hechos en este conflicto.

Paradójicamente, el odio a Putin no va en consonancia con la ayuda a los ucranianos. Quizá por eso a España se le ha dejado de lado, por la anomalía que supone un gobierno de este tipo en Europa, que provoca que no quieran enviar armas a Ucrania o si lo hacen, llamarlas «material ofensivo». El Gobierno no se siente cómodo, con Podemos detrás atentos, más allá de ayuda humanitaria, de acogimiento a refugiados y como mucho material «defensivo».

APROVECHAN PARA SEGUIR CON SU AGENDA IDEOLÓGICA

Y para ello meten a Putin en sus cruzadas contra la extrema derecha y los derechos de las mujeres y del colectivo LGTBI. Es cierto que Vladimir Putin y su gobierno persiguen a este último colectivo, pero ¿realmente creen que el líder ruso tiene una alianza con la extrema derecha cuando sus aliados son Irán, Venezuela, Nicaragua, Bielorrusia, Cuba o Siria?

Ante todo ello, Pedro Sánchez prefiere soportar la humillación y ninguneo en el ámbito internacional, antes de ponerse firme con sus socios en momentos tan cruciales. Podemos e IU han arruinado aún más la imagen de Sánchez en Bruselas y en Washington. El líder del PSOE pretendía con este conflicto al menos reforzar su perfil presidencial y compromiso con la OTAN, pero gracias a sus socios ahora España ha bajado un escalón más en la relevancia internacional, y lo que es peor, ya no se fían de nosotros. Estaba claro que ante cualquier conflicto, que pocos esperaban, la coalición se vería descubierta más aún en sus contradicciones, como así ha sido.

LOS PALOS EN LA RUEDA

Lejos de ofrecer apoyo y soluciones, el Gobierno tiene el enemigo dentro. Podemos e IU criticó el pasado lunes la decisión de la Unión Europea de enviar armas a Ucrania porque «no va en la línea de la distensión» y pide centrar los esfuerzos en «encauzar» el conflicto con medios diplomáticos, ante las vías de diálogo abiertas entre ambos países.

Además, cuestionaron el posible veto a los medios de propaganda y desinformación rusos, al entender que puede generar una «espiral peligrosa» y afectar a los corresponsales extranjeros en Moscú, así como una mayor reflexión sobre el impacto de las sanciones económicas, dado que deben centrarse en los oligarcas rusos y no en la población. Y por supuesto, insinuaban que la OTAN, más que solución, era causa del problema y entorpecían las labores de paz.

podemos putin

LAS BIZARRAS SOLUCIONES DE PODEMOS

Los análisis de Podemos podrían tener un pase y tenerlos en cuenta, aunque solo fuera por no seguir al pie de la letra la opinión mayoritaria, pero si escuchamos sus soluciones surge la sorpresa e incluso la hilaridad. Los socios del Gobierno han llegado a proponer al Congreso enfrentarse a Putin con «los movimientos feministas y ecologistas». Y no es una interpretación errónea porque está grabado en vídeo. Fue el portavoz de Podemos, Gerardo Pisarello, quien soltó la «perla» en la comparecencia del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, para analizar la situación en Ucrania, un día antes de la invasión rusa.

la solución de podemos contra putin, es enfrentarse a él con «los movimientos feministas y ecologistas»

«Nuestra esperanza real está en que sean esas gentes trabajadoras, que sean las mujeres, que sea la juventud, que sean los movimientos feministas y ecologistas quienes impulsen desde ya un movimiento por la paz y por la seguridad colectiva. Porque no hay otra alternativa frente a las mentiras de los señores de la guerra, frente al oscuro negocio de las guerras imperiales por el control de los recursos energéticos. Sólo hay un camino, la conquista ciudadana de la paz y de un orden internacional menos brutal, más cooperativo y más sostenible», aseguró el dirigente podemita.

Lo sorprendente es que, en los siguientes minutos de la intervención de Pisarello, se dedicó a blanquear y justificar en cierto modo a Putin, lo que se contradice con la acusación de que el líder ruso está aliado con la extrema derecha mundial. Para Podemos está claro que los culpables de esta situación son EEUU y la OTAN.