El PSOE «distrae» con la Justicia para evitar pronunciarse sobre el anticipo de elecciones generales

Las principales encuestas de las últimas semanas posicionan al Partido Popular como el claro favorito para ganar las próximas elecciones nacionales de 2023. Unas cifras positivas hacia el partido de Alberto Núñez-Feijóo que han provocado que los populares busquen forzar al actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a adelantar las elecciones por el país. Interés del PP que, sin embargo, no parece obtener respuesta del Ejecutivo nacional, que parece centrado en los conflictos del poder judicial en su discurso, evitando posicionarse ante un posible adelanto electoral.

Apenas un año queda para que los españoles vuelvan a enfrentarse a las urnas para decidir quién dirigirá el país durante los próximos cuatro años. Una elección que se producirá después de los comicios autonómicos y municipales, y que actualmente están provocando una fuerte tensión política. Y es que los partidos políticos, a pesar de que aún quedan meses para la convocatoria de elecciones, parecen estar dispuestos a prácticamente todo para conseguir el apoyo ciudadano suficiente para conquistar el palacio de la Moncloa en 2023.

Situación política enmarcada en la guerra de Ucrania y Rusia, así como en una brutal situación de crisis energética y económica, en la que parece que el Partido Popular se posiciona, aunque por poca distancia, como el favorito para ganar las encuestas, pudiendo alcanzar la victoria presidencial. Eso sí, con el apoyo de otros partidos de la derecha democrática como Vox.

Así pues, según las últimas encuestas, como la publicada por La Razón, lo cierto es que Alberto Núñez-Feijóo podría arrebatarle las elecciones a Pedro Sánchez, desgastado tras los últimos y complejos años de legislatura. Y es que, según las cifras, el PP arrancaría 2023 con una horquilla electoral de 141-143 escaños a favor, aumentando en más de tres millones la cifra de votantes, y pudiendo alcanzar la mayoría absoluta junto al partido de Santiago Abascal, que conseguiría más de 40 escaños.

Sondeos que parecen coincidir con las previsiones internas del Partido Popular, y que gustan al partido de Alberto Núñez-Feijóo, que insiste ante el Gobierno nacional y ante los medios de comunicación en la necesidad de adelantar las elecciones generales.

«Me preocupa mucho qué puedan seguir haciendo hasta las elecciones generales» lamentaba el líder popular en la Junta Directiva Nacional, en la que ha destacado que Pedro Sánchez «es legítimamente presidente, pero no es legítimo lo que está haciendo: poner en juego la democracia, subvertir la separación de poderes, cambiar las normas penales por mandato […] colocar en órganos neutrales hace solo meses a miembros del Gobierno…» ha sentenciado Feijóo.

EL PSOE EVITA LAS ELECCIONES GENERALES CON LA JUSTICIA

Críticas de los populares contra el equipo de Gobierno, y en especial contra el presidente socialista Pedro Sánchez, acompañadas de la exigencia de unas nuevas y anticipadas elecciones generales en el país, que sin embargo, parecen no haber sido escuchadas por el equipo de Gobierno. Y es que el PSOE, principal gestor del Ejecutivo, parece estar más centrado en la polémica sobre los principales órganos del Poder Judicial, más allá de en las encuestas electorales que le son desfavorables.

Así pues, mientras los de Alberto Núñez-Feijóo apuestan por un adelanto electoral, lo cierto es que el PSOE se encuentra centrado en conseguir la renovación del Tribunal Constitucional, bloqueada por el Partido Popular, aparentemente en contra de los mandatos de la Constitución española.

Tanto es así, que el domingo, los socialistas presentaban dos escritos ante el Tribunal Constitucional para frenar el recurso de amparo realizado por el Partido Popular, que busca frenar la votación de las Cortes a las enmiendas de la renovación del órgano. En concreto, el PSOE ha destacado que la petición del PP, de aprobarse, «vulneraría el derecho de la ciudadanía a participar en los asuntos públicos a través de sus representantes», interfiriendo directamente en las obligaciones y funciones de las Cortes Generales.

«Como en todo proceso judicial, la composición de la Sala del órgano debe ser tal que no deba permitir albergar la más mínima duda respecto a la imparcialidad de quienes lo integran» destacaban los socialistas. Unas críticas que no sólo parecen destinadas a conseguir la renovación de los principales órganos judiciales sino que también, y especialmente, «distraer» a la ciudadanía de la crisis política que atraviesa el Gobierno actualmente.

Una crisis reflejada en las encuestas realizadas a la sociedad española que, a cerca de un año de las elecciones nacionales, no ha dudado en «suspender» a gran parte de los políticos del Ejecutivo nacional, y del conjunto del Congreso, siendo Yolanda Díaz la más valorada actualmente, con apenas un aprobado raspado que demuestra el enfado de la ciudadanía ante una clase política que, a pesar de haber sido escogida en las urnas, no parece representar a los españoles en las Cortes Generales del país.