La responsable de Bienestar Animal de Madrid, denunciada por no registrar su negocio

  • Elsa Martín Olsen tiene un centro canino que no cuenta con el registro de actividades económico pecuarias.
  • Un portavoz de la Consejería de Medio Ambiente aseguran que ese modelo de negocio no lo requiere.
  • Los técnicos de la Consejería y los veterinarios opinan que cualquier centro que trate con animales debe estar registrado.
  • La comisionada del Gobierno para el Bienestar Animal de la Comunidad de Madrid, la expresentadora de televisión Elsa Martín Olsen, ha sido denunciada por no disponer del registro de actividades económico pecuarias en su centro canino, Campus Perruno. Pese a que el departamento de prensa de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad sostiene que el negocio de Martín Olsen dispone de todos los permisos pertinentes, tanto los técnicos de la propia Consejería como el Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid opinan diferente. Para los expertos y los especialistas, cualquier centro que trate con animales necesita este registro.

    La denuncia la ha interpuesto un vecino de Brunete (Madrid), el municipio donde está ubicado Campus Perruno. El denunciante se ha dirigido directamente al área de protección animal de la Consejeria de Medio Ambiente, lugar desde donde han confirmado a este medio que se necesita el registro de actividades económico pecuarias para cualquier negocio que tenga trato con animales. Ahora, la Consejeria se debe tramitar la denuncia.

    La información que ha publicado en exclusiva MONCLOA.COM ha salpicado a la comisionada para el Bienestar Animal. El criterio de los técnicos del área de protección animal (dependiente de la propia Consejería de la que Martín Olsen es un alto cargo) y el de los veterinarios ha motivado la denuncia que ahora pesa sobre la comisionada. Martín Olsen sostiene que dispone de todos los permisos necesarios y desde el departamento de comunicación de la Consejería aseguran que en ese modelo de negocio en concreto no es necesario. Una opinión que difiere de la de los técnicos y los veterinarios.

    Los argumentos del departamento de comunicación de la Consejería sostienen que el negocio de Martín Olsen no encaja dentro de las exigencias de ese registro. Campus Perruno es un terreno de 30.000 metros cuadrados en Brunete (Madrid) al que los clientes acuden con sus perros para que se bañen en la piscina canina, pero las mascotas no se quedan en el recinto, por lo que, según las explicaciones de los portavoces de la Consejería, no es necesario que disponga del registro de actividades económico pecuarias.

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    Sin embargo, el Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid es claro: «cualquier centro que tenga cualquier tipo de animal» lo necesita. Un criterio que comparten los técnicos, quienes tras una llamada han confirmado que cualquier centro que tenga actividad económica relacionada con animales exige este registro, incluidos aquellos en los que los dueños traen a sus mascotas y se retiran en el día, como los centros de adiestramiento o las peluquerías caninas.

    La opinión que han reflejado tanto los veterinarios como los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente también parece estar amparada por la propia ley. En el anexo del Decreto 176/1997, del 18 de diciembre figura que deben disponer de este registro prácticamente cualquier centro que trabaje con animales, como “criaderos, residencias, centros de venta, escuelas de adiestramiento, albergues o centros de acogida, centros de tratamiento y otros centros”.

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    Ante toda esta información, esta fue la respuesta íntegra que ha ofrecido el departamento de prensa de la Consejería de Medio Ambiente: «El proyecto cuenta con su correspondiente licencia de actividad y funcionamiento. Se trata de un proyecto que no se impulsó por completo y sólo se desarrolló la parte de ocio, que se desarrolla de mayo a septiembre, donde los propietarios de los perros, que son los responsables de los animales, se reúnen de manera puntual para disfrutar al aire libre de una piscina y correr por el campo. En ningún caso ni residen, ni se acogen ni se rehabilitan animales en el proyecto”.

    Unas explicaciones que no han convencido a los expertos consultados por este periódico, especialmente los veterinarios, quienes consideran que cualquier centro que tenga cualquier tipo de trato con animales requiere este registro. Especialmente porque está destinado a ofrecer un control sanitario. Y una piscina en la que se bañan perros de diferentes orígenes puede ser un foco de infecciones que debe ser controlado, tal y como han asegurado los expertos a MONCLOA.COM.

    LA PISCINA CANINA

    Campus Perruno es un terreno enorme con una piscina para perros en las que los animales se relacionan y juegan. Cuesta cinco euros por perro y diez por persona. Pero en los últimos años el centro también ha incluido hotel para perros y guardería canina con recogida de las mascotas a domicilio. Todo un proyecto que le ha valido a Martín Olsen como aval para ostentar el cargo que actualmente ostenta y en el que recibe una remuneración de 75.084 euros brutos al año.

    Fue la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, la que seleccionó a Martín Olsen, expresentadora del reality La selva de los famoSOS, para ocupar un cargo que llevaba tiempo sin dueño. Campus Perruno fue uno de los motivos, según se detalló en la nota de prensa, por la que Ayuso se decantó por Martín Olsen, pero ahora este centro ha salpicado de polémica su nombramiento.

    El negocio ha estado muy activo en los últimos tres años. Reseñas, reportajes y todo tipo de presencia en las redes sociales así lo acreditan. Campus Perruno ha crecido considerablemente, hasta el punto de ofrecer recogida a domicilio de los animales, hotel, guardería y todo tipo servicios para el mejor amigo del hombre. Solo queda por ver si la denuncia prospera o se queda a las puertas.