El bulo de la reinfección por coronavirus: los expertos lo niegan

  • Los médicos creen que los segundos positivos se deben a otras causas.
  • Los virólogos españoles tampoco apuestan porque eso sea posible.
  • Un estudio en monos apunta a que no es posible la reinfección.
  • Primero fue un estudio con monos. Y ahora, cada virólogo, médico o investigador que ha sido entrevistado coincide en lo mismo: es imposible que alguien que ha superado el coronavirus pueda volver a padecerlo, al menos con los mismos síntomas. Así funcionan las vacunas. Y sobre los segundos positivos, como la propia ministra de Igualdad, Irene Montero, se deben a otras realidades que poco tienen que ver con la posibilidad de que una persona pueda padecer dos veces seguidas el coronavirus.

    Un estudio del Cold Spring Harbor Laboratory de EEUU demostró que los macacos que superaban el coronavirus desarrollaban anticuerpos contra el patógeno. Lo que parecía indicar que en humanos sería lo mismo. Ahora, los hospitales y los centros de salud están utilizando plasma de aquellos que han superado la enfermedad para ayudar al sistema inmune de los más graves. Lo que significa que esa sangre contiene anticuerpos que han desarrollado una respuesta muy efectiva contra el coronavirus.

    José María Peña Sánchez de Rivera, catedrático de Medicina en la Universidad Autónoma y Jefe Clínico de Medicina Interna en el Hospital Universitario La Paz de Madrid, ha asegurado en una entrevista para Eldiario.es que esa reinfección que ha corrido por los móviles de algunas personas y por las redes sociales es imposible. «¿Existe el riesgo de reinfección de pacientes que se han curado? No. La revista ‘Science’ empezaba un artículo diciendo «no digan tonterías». Tajantemente, no hay posibilidad de reinfección en curados», ha asegurado Peña Sánchez de Rivera.

    [td_block_11 custom_title=»» separator=»» post_ids=»85506″ limit=»1″ css=».vc_custom_1496993590403{border-top-width: 1px !important;border-right-width: 1px !important;border-bottom-width: 1px !important;border-left-width: 1px !important;padding-top: 5px !important;padding-right: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;padding-left: 5px !important;border-left-color: #000000 !important;border-left-style: solid !important;border-right-color: #000000 !important;border-right-style: solid !important;border-top-color: #000000 !important;border-top-style: solid !important;border-bottom-color: #000000 !important;border-bottom-style: solid !important;border-radius: 4px !important;}» tdc_css=»»]

    Una opinión que comparte el virólogo Luis Enjuanes, quien ha afirmado que «si un paciente se ha curado y se ha hecho seropositivo, es decir, tiene defensas». Pero, entonces, ¿por qué hay personas que vuelven a dar positivo tiempo después, una vez han superado el coronavirus? Enjuanes lo tiene claro: «esto se da porque pueden quedar reservorios en donde la sangre no circula con tanta facilidad ni tampoco células de la defensa como macrófagos que suelen destruir las células que quedan», ha asegurado en una entrevista.

    La reinfección no es posible, y si se da un segundo positivo es por miles de razones. El cuerpo tarda, según aseguran los expertos, hasta un mes en elaborar una respuesta clara a las enfermedades víricas. Además, es posible que haya restos del virus inactivos que puedan dar un segundo positivo, pero eso no significa que la persona vaya a pasar el proceso de la enfermedad una vez más.

    Tal es el valor de las personas que han pasado la enfermedad que su sangre podría ser clave para combatir el virus. Es una medida muy antigua, pero muy funcional. Aquellos que padecen el virus pueden curarse gracias a las defensas de los que la han superado. Por eso se está pidiendo donaciones a aquellos que han pasado el coronavirus sin mayores consecuencias.

    [td_block_11 custom_title=»» separator=»» post_ids=»76346″ limit=»1″ css=».vc_custom_1496993590403{border-top-width: 1px !important;border-right-width: 1px !important;border-bottom-width: 1px !important;border-left-width: 1px !important;padding-top: 5px !important;padding-right: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;padding-left: 5px !important;border-left-color: #000000 !important;border-left-style: solid !important;border-right-color: #000000 !important;border-right-style: solid !important;border-top-color: #000000 !important;border-top-style: solid !important;border-bottom-color: #000000 !important;border-bottom-style: solid !important;border-radius: 4px !important;}» tdc_css=»»]

    En Estados Unidos han ido más lejos y han utilizado directamente la sangre de esos pacientes, no el plasma, que solo contiene las defensas, sino todo el pack que contiene también los glóbulos rojos. Con este método esperan poder salvar a los más graves y conseguir contener al patógeno que ha puesto a todo el mundo en una situación crítica.

    CERCA DEL PICO

    Estamos hartos de oír hablar del pico. Pero es necesario, ya que es el indicativo de que vamos por el buen camino. Los nuevos datos de infectados (que ya hablan de más de 80.000 afectados por el coronavirus y más de 7.300 muertos) parecen indicar que la tendencia se suaviza y que en breve empezarán a descender los casos. Algunos sueñan ya con que a finales de abril se podrán levantar las primeras restricciones de la cuarentena y que el país recupere, poco a poco, esa normalidad tan ansiada.

    Aún así, las consecuencias serán más que notables. Entre tanto, el Gobierno debate sobre si alargar el estado de alarma más semanas con el objetivo de recuperar cuanto antes la normalidad y que las empresas empiecen a retomar su actividad. Habrá que seguir día a día la evolución de la pandemia para saber si estamos en el buen camino.