La «nueva normalidad», mientras sigamos coexistiendo con el coronavirus, ha llegado para quedarse. Por eso, organizaciones de todo tipo hacen todo lo que está en su mano para adaptarse lo más rápido posible. La DGT es una de ellas. Ya ha anunciado algunas soluciones para hacerse cargo de las necesidades sanitarias que han surgido en estos momentos.
Además, también ha sabido ver las oportunidades que ha dejado el paso del estado de alarma en nuestro país, por lo que ha creado un decálogo en el que aporta novedades también con respecto al tráfico. Gracias a ello, no solo se van a reducir los riesgos provocados por la pandemia, sino que también se contribuirá a que nos podamos mover de una forma mucho más limpia, segura y humana.
La nueva normalidad vial ha dejado novedades importantes. Estos son los 10 cambios que suponen la revolución de la DGT.
Nueva normalidad y nueva ciudad, el buque insignia de la DGT
La idea es clara: ampliar los espacios para que los ciudadanos puedan circular de forma tranquila. Por ejemplo, en la ciudad de Pontevedra esta iniciativa ya se comenzó a dar hace nada menos que 20 años.
En este lugar, el coche queda en segundo plano y los peatones toman el control de la ciudad. Más del 70% del espacio público es la cifra por la que los ciudadanos pueden pasear tranquilamente.
Además, otra de las medidas fue bajar la velocidad a 10 km/h en aquellos sitios donde hay tanto peatones como coches. En los últimos nueve años, no existe ningún registro de muerte a causa del tráfico.
