La Audiencia Provincial de Bizkaia ha condenado a un hombre y una mujer a una pena de dos años de prisión a cada uno de ellos, como responsables de un delito de estafa agravada, por obtener mediante engaños cerca de 11.000 euros de una mujer, prima segunda del acusado, con la falsa promesa de que publicarían sus obras, al conocer su oficio de escritora.
Además, ambos condenados deberán indemnizar a la estafada, conjunta y solidariamente, con 23.424,26 euros en concepto de responsabilidad civil, suma de los 12.500 euros por el tiempo que tardó en recuperarse del daño emocional causado y de los cerca de 11.000 euros de los que ilícitamente se apropiaron.
Según recoge la sentencia, contra la que se puede interponer recurso ante el TSJPV, los acusados (pareja sentimental) conocían a la perjudicada por ser el encausado su primo segundo y su oficio de escritora.
Aprovechándose de esta relación entre los tres, por la confianza que ello ofrecía a la víctima, ambos acusados de común acuerdo y guiados por el propósito de obtener un «beneficio patrimonial indebido» a cargo del patrimonio de ésta, se pusieron en contacto con esta última a principios de enero de 2015 ofreciéndose para ayudarla en la publicación de sus obras, «sin intención alguna de llevar a cabo ninguna publicación de sus obras a través suyo».
IMPORTANTE EDITORIAL
De esta manera, a principios del mes de enero de 2015, la acusada le comentó a la víctima, «sin ser esto cierto», que conocía a los responsables de una importante editorial y que se pondría en contacto con la misma para que valoraran publicar alguno de sus escritos.
Al poco tiempo, ambos acusados le comentaron a la víctima, a pesar de que no era cierto, que la citada editorial estaba interesada en publicar alguno de sus libros. Para dar mayor veracidad a esta afirmación, los encausados hicieron creer a la escritora que ocupaban altos cargos en una empresa (inexistente), a través de la cual intermediaría con la editorial para la publicación de sus obras, ya que le explicaron, «a sabiendas que no era cierto», que la citada empresa tenía relación comercial con la editorial.
Una vez creada en la estafada la expectativa de edición y publicación de sus obras, le explicaron que para ello debía de adelantar cantidades de dinero y que dichas cantidades le serían devueltas en cuanto se editasen los libros, en la totalidad o en su mayor parte.
La encausada telefoneaba a la escritora haciéndose pasar por una responsable de la editorial y los acusados le iban dando cuenta a través de mensajes de correo electrónico y por teléfono, de supuestas reuniones con los responsables de la editorial «que nunca se celebraron y conversaciones telefónicas que nunca se realizaron, así como de planes irreales de incluir sus textos como material de libros de texto».
ENTREGA DE CANTIDADES
La víctima, en la creencia de que las afirmaciones de su primo y la pareja de éste eran ciertas, y ante lo expuesto, en la creencia de que iban a ser destinadas a la edición y publicación de sus obras, entregó a ambos encausados diversas cantidades hasta sumar cerca de 11.000 euros.
Durante el tiempo en que la víctima iba ingresando las cantidades mencionadas, los acusados conocieron las dificultades económicas que tenía ésta para hacer el pago y que recibía ayuda de terceros para sufragar los pagos.
Los encausados no procedieron a devolver los importes señalados a la escritora ni se llevó a cabo ninguna edición ni publicación por la intermediación de los encausados con la citada editorial, que no tiene ni tuvo nunca relación profesional con los encausados.
Además, a consecuencia de estos hechos, la víctima sufrió un trastorno de adaptación que precisó de tratamiento farmacológico y consultas con seguimiento de especialistas durante 240 días en los que estuvo impedida para realizar sus labores habituales.
