Estamos pasando momentos muy complicados como sociedad. El coronavirus ha venido a marcar un antes y un después en la vida de millones de personas en todo el mundo. Hay muchas preguntas, pocas respuestas, y un sinfín de casos que día a día salen a luz pública. Lo cierto es que la Organización Mundial de Salud, los Gobiernos, y Profesionales en el área de las Ciencias, se mantienen evaluando exhaustivamente cada uno de los avances. Para nadie es un secreto que el Universo ha experimentado un año sin precedentes en la historia de la humanidad.
De ahí la necesidad de seguir con los cuidados y la prevención en todo momento. Cada acción es importante en aras de no acabar contagiados de COVID-19. Por supuesto que las alarmas se disparan en todos los rincones del planeta. En España, se ha producido una desescalada considerable, sin embargo, existen comunidades con rebrotes. Si nos vamos para América del Sur, aún hay países que se las ven oscuras como es el caso Brasil, Colombia, y de una manera sigilosa pero latente está Venezuela.
Las dudas siempre van a estar, y aún más porque estamos en presencia de un virus que en su raíz más inquietante ha desafiado a todos los médicos y organizaciones políticas. Te presentamos varios consejos muy frecuentes, pero a la vez de gran relevancia para que evites el contagio de coronavirus.
Lo que estamos viviendo: El coronavirus
La realidad es esta, la que vivimos y padecemos, pero debemos afrontarla con mucha responsabilidad. Las informaciones sobre el coronavirus son muchas, pero muy pocas llegan a la exactitud, pues conforme pasan los días se dan a conocer nuevos detalles que anteriormente se desconocían. No obstante, el coronavirus forma parte una extensa familia de virus que pueden causar enfermedades tanto en animales como en humanos.
En los humanos, se sabe que varios coronavirus causan infecciones respiratorias que pueden ir desde el resfriado común hasta enfermedades más graves como el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) y el síndrome respiratorio agudo severo (SRAS). Es importante señalar que los síntomas más habituales del COVID-19 son la fiebre, la tos seca y el cansancio.
Otros síntomas menos frecuentes que afectan a algunos pacientes son los dolores y molestias, la congestión nasal, el dolor de cabeza, la conjuntivitis, el dolor de garganta, la diarrea, la pérdida del gusto o el olfato y las erupciones cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies. Estas señales suelen ser leves y comienzan gradualmente. Algunas de las personas infectadas solo presentan síntomas leves.
