El 11% de los españoles ha sufrido o ha estado a punto de sufrir un accidente por utilizar el móvil al volante

Un 11% de los conductores europeos (así como de los españoles) reconoce haber sufrido o haber estado a punto de sufrir alguna vez un accidente de tráfico por utilizar el teléfono móvil mientras conducía, a pesar de que la mayoría considera las distracciones una de las principales causas de los siniestros en carretera.

Así lo pone de manifiesto el 7º Barómetro de la conducción responsable, publicado por la Fundación VINCI Autoroutes y realizado por IPSOS, que cuenta con una muestra de 12.400 conductores de 11 países europeos, entre ellos España.

Según resalta el estudio, el 50% de los conductores europeos realiza llamadas por teléfono mientras conduce utilizando Bluetooth con manos libres (45% de los españoles), mientras que el 25% habla por teléfono durante la conducción sin dispositivo de manos libres (17% de los españoles).

Además, un 44% configura el GPS al volante (29% de los españoles); un 23% envía o lee SMS o correos electrónicos mientras conduce (14% de los españoles); un 19% informa a los demás conductores de un suceso a través de una aplicación mientras conduce (15% de los españoles); e incluso un 6% ve películas o vídeos en un smartphone o tablet mientras conduce (5% de los españoles).

Asimismo, el estudio revela las infracciones o conductas de riesgo deliberadas que cometen los europeos. Por ejemplo, el 88% de los encuestados reconoce superar en unos km/h los límites de velocidad (un 83% en el caso de los españoles); el 53% se olvida de poner el intermitente para adelantar o cambiar de dirección (54% de españoles); el 9% admite conducir con una tasa de alcohol a la permita sin notar sus efectos (5% de los españoles); y un 3%, tanto de europeos como de españoles, asegura conducir tras haber consumido drogas.

El informe también pregunta a los europeos sobre aquellas prácticas peligrosas, especialmente durante los trayectos largos y con mucho tráfico, que realizan, revelando una «escasa conciencia del riesgo de somnolencia y comportamientos inadecuados para prevenirlo».

Así, aunque el 20% de los encuestados pone la somnolencia en primera posición entre las principales causas de los accidentes mortales en autopistas (11% en España), un 13% (tanto de europeos como españoles) declaran haber sufrido o haber estado a punto de sufrir un accidente por adormecerse al volante. De hecho, un 18% asegura haber invadido alguna vez la zona de frenado de emergencia o el arcén de la carretera debido a un momento de distracción o adormecimiento, porcentaje que suba a un 23% en el caso de los españoles.

Sin embargo, contradictoriamente, un 28% de los participantes en el estudio considera que es posible seguir conduciendo estando cansado (26% de los españoles) y, de hecho, un 39% de los conductores europeos (31% en España) asegura que conducen igual de bien o incluso mejor cuando están cansados.

ESPAÑA, EL PAÍS DONDE MÁS SE TOCA EL CLAXON

En cualquier caso, la inmensa mayoría de los europeos es muy indulgente con su propia forma de conducir, pero mucho menos cuando se trata de la de los demás. Así, el 97% de los conductores participantes citan al menos un adjetivo positivo para describirse al volante (97% también en España), mientras que el 83% (76% en España) cita, al menos, un adjetivo negativo para describir la conducta de los demás.

Los europeos se consideran ante todo atentos (76% de los europeos; 73% de los españoles), tranquilos (59% de los europeos, 68% de los españoles) y educados (28% de los europeos, 19% de los españoles). Al contrario, no dudan en calificar la forma de conducir de los demás de irresponsable (45% de los europeos, 43% de los españoles), peligrosa (28% de los europeos, 22% de los españoles), estresada (38% de los europeos y de los españoles) y agresiva (29% de los europeos, 26% de los españoles).

Sin embargo, el nivel de conductas incívicas registradas en las carreteras europeas plantea interrogantes sobre lo autocomplacientes que son los conductores con sus propios comportamientos, pues el estudio revela que el 55% reconoce que a veces insulta a otros conductores, un porcentaje que sube al 58% en el caso de los conductores españoles.

Además, el 51% toca el claxon de forma intempestiva a los conductores que le irritan, siendo España el país donde más conductores realizan esta acción, ya que el 66% tiene esta actitud; un 33% se pega deliberadamente al vehículo de los conductores que le irritan (mismo porcentaje en España); el 34% adelanta por la derecha en la autopista (un 44% en el caso de los españoles); y un 20% se baja del vehículo para discutir con otro conductor (también un 20% de españoles).

Estas conductas incívicas generan un clima de gran tensión en la carretera, ya que el 84% de los conductores europeos (y hasta un 89% de los españoles) confiesa que alguna vez ha sentido miedo ante el comportamiento agresivo de otro conductor, aunque solo el 3% se define como agresivos cuando conducen (ídem entre los españoles).