El líder de Más País, Íñigo Errejón, pronunció recientemente en el Congreso un discurso sobre su iPhone que ha desatado la polémica en redes por varias razones. Errejón se sacaba del bolsillo el teléfono de la manzana, no sin antes aclarar que era un regalo que proporcionaba el Congreso a los diputados, para dar algunos detalles sobre las innovaciones tecnológicas que el teléfono por todos conocido contiene.
Por un lado, el discurso ha enfurecido a algunos usuarios, por un lado, por el hecho de que el Congreso pueda permitirse invertir tal cantidad de dinero en proporcionar ese tipo de teléfono móvil a los diputados, sabiendo el alto precio de este. Por otro, la defensa del sector público y el Estado vertida por el de Más País ha hecho levantar la ceja a los más liberales.
El argumento del líder de izquierdas argumentaba que, pese a ser el iPhone el invento de una empresa privada, las importantes tecnologías de software que porta, como el GPS, la pantalla multitáctil, las baterías de ion-litio y hasta el propio Internet.
«Cuando yo miro un iPhone, en realidad lo que veo es la perfecta demostración de que la única posibilidad de tener un desarrollo industrial es con un rol central de un Estado emprendedor del que luego se aprovechan y con el que luego colaboran muchas empresas privadas», concluía Errejón.
Por lo que ha resultado llamativo este discurso es también el hecho de que, en redes, se utilice como crítica recurrente el reprochar a un usuario de izquierdas que tenga un iPhone, convirtiéndose este un símbolo del capitalismo estadounidense. Es por ello por lo que algunos han juzgado a Errejón espetando: «La chapa que da este para justificar que tiene un iPhone de mil trescientos euros».
CRÍTICAS
«Eres un niñato», le arroja el perfil de Spanish Libertarian, canal de YouTube de temática libertaria. «Lo que no entiendo es por qué le tienen que dar a todos en el Congreso un iPhone… que se lo paguen ellos de su bolsillo […] Es primordial reducir el gasto político de este país», reprocha @Gucebl. «Cuando intentas justificar que tienes un iPhone pero eres comunista. Casi… casi pero no», opina otro.
Lo cierto es que estas ideas de Errejón no son nuevas, habiendo otros autores que defienden que, al contrario de lo que muchos creen, las grandes revoluciones tecnológicas suelen provenir de entidades públicas, mientras que las empresas, condicionadas por su rechazo al riesgo por las posibles pérdidas económicas, no producen tantas innovaciones como podría pensarse.
