Diciembre es el último mes del año, el mes del invierno, el mes de la Navidad y también el mes en el que muchos confían en el que la diosa fortuna les tocará con su varita y les conceda un premio de la lotería de Navidad. El 22 de diciembre, como cada año, llegará el sorteo de lotería que más ilusión y alegría genera. Sin embargo, el entusiasmo que esta genera tiene más que ver con el hecho de que es una tradición que se comparte con amigos y familiares que por la «espectacularidad» de sus premios. Lo vemos a continuación.
Un poco de historia
Los franceses invadía España la primera vez que se celebró la lotería de Navidad en nuestro país. De hecho, el sorteo tuvo lugar en Cádiz, precisamente por ser esta la única ciudad que resistía la invasión napoleónica. Se llamaba Prósperos Premios y repartió 8.000 reales. Obviamente, la iniciativa partió del gobierno que tenía que recaudar dinero para hacer frente a la guerra de la Independencia. Desde entonces, y trasladado ya el sorteo a Madrid en 1814 jamás ha dejado de celebrarse, e incluso se hizo por partida doble durante la Guerra Civil (una en el bando republicano y otra en el nacional).
