Asturias solicita el paso a la fase 3 de la desescalada

El Gobierno del Principado, presidido por el socialista Adrián Barbón, ha decidido solicitar el paso de la comunidad autónoma a la tercera etapa de la desescalada. Si esta propuesta es aceptada, Asturias iniciará la fase 3 el lunes 8 de junio y se mantendrá en la misma durante dos semanas, hasta el día 21, cuando está prevista la finalización del estado de alarma.

Así lo ha informado el Ejecutivo asturiano, que recuerda que la tercera fase es la última de la desescalada, previa a la recuperación de lo que se ha venido en llamar «nueva normalidad». De todos modos, el Ejecutivo del Principado está resuelto a continuar actuando con el máximo rigor y la mayor prudencia posible, tal y como ha venido haciendo hasta ahora. Por ello, anuncia que revocará su petición si los datos empeoran.

Así, en el supuesto de que en los próximos días, antes de que se publique (en principio, el sábado) la resolución que determine qué provincias pasan a la fase 3, hubiese algún dato de transmisión comunitaria no controlada, el Principado solicitará con carácter de urgencia que se suspenda el cambio.

El Gobierno de Asturias ha tomado esta decisión después de haber analizado la evolución de la epidemia en la comunidad autónoma con los informes aportados por el Servicio de Vigilancia Epidemiológica de la Dirección General de Salud Pública.

BROTES EN DOS RESIDENCIAS DE MAYORES

El Gobierno del Principado ha recibido con preocupación los datos de los últimos días, en los que se ha comprobado la existencia de brotes epidémicos en dos residencias de mayores, el Instituto Gerontológico Astur, la conocida como residencia El Carmen, en Gijón, y Santa Teresa, en Oviedo. En el primer caso se detectaron 19 positivos –15 residentes y cuatro trabajadores– y en el segundo, cuatro –tres residentes y una trabajadora–.

Ambos brotes han estado presentes en las consideraciones del Gobierno de Asturias. No obstante, según destaca el Gobierno asturiano, después de haber analizado la situación, el Ejecutivo ha concluido que la reacción de la Consejería de Salud ha sido rápida en la detección precoz de los casos, en la intervención en las residencias afectadas y en el estudio de los contactos de los casos identificados.

«Esta ágil capacidad de respuesta por parte de vigilancia epidemiológica y del servicio de salud ha sido valorada como un elemento positivo a la hora de solicitar el cambio de fase. Asimismo, se ha considerado positiva la no existencia de transmisión comunitaria de virus en el momento actual y que los casos existentes están localizados en puntos muy concretos del entorno sociosanitario», destaca el Gobierno del Principado de Asturias.

El Gobierno de Asturias pretende que el paso a la fase 3 se realice con las mayores condiciones de seguridad, de tal manera que se dificulte la posibilidad de rebrotes y se refuerce la capacidad de detección temprana de los mismos. Esto supondrá extremar las medidas de protección en los entornos sanitarios y sociosanitarios.