La ONU elige al exministro Moratinos para dirigir la Alianza de Civilizaciones

Primer éxito diplomático de Pedro Sánchez. El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha comunicado al presidente del Gobierno que elegirá al español Miguel Ángel Moratinos para dirigir la Alianza de Civilizaciones a partir del 1 de enero de 2019, según indicaron fuentes diplomáticas a MONCLOA.COM.

Guterres hará su anuncio en el próximo foro de la Alianza de Civilizaciones que se celebrará los días 19 y 20 de noviembre en Nueva York. El mandato de Moratinos será de cuatro años prorrogables y al frente de este organismo de la ONU sustituirá al qatarí Al-Nasser, quien lleva cinco años y medio en el cargo.

Tanto este Gobierno, como el anterior dirigido por el PP, apoyaron la candidatura del exministro de Asuntos Exteriores para la Alianza de Civilizaciones ya que apenas hay españoles en puestos de relevancia internacional.

La fidelidad española a esta iniciativa de José Luis Rodríguez Zapatero -que posteriormente fue asumida por Naciones Unidas- ha sido tal, que incluso Mariano Rajoy siempre mantuvo la contribución económica de España mientras estuvo en el poder.

En noviembre del año pasado, por ejemplo, el Consejo de Ministros aprobó una contribución de 200.000 euros para la Alianza de Civilizaciones. Para este año la cifra será idéntica salvo que haya nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE).

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La elección del próximo Alto Representante de la Alianza corresponde al secretario general de la ONU por designación directa, a diferencia del proceso de selección que hay en agencias internacionales como la UNESCO, la OMT o la FAO, organismo que Moratinos intentó liderar en 2011 aunque perdió en la votación final contra el brasileño José Graziano da Silva.

España es uno de los principales contribuyentes al presupuesto de la ONU y desea tener más puestos de primer nivel dentro de Naciones Unidas. Hace un año terminó la presencia de Joan Clos como director del programa para los asentamientos humanos (ONU-Habitat, con sede en Nairobi).

Además, el anterior Gobierno intentó que Guterres nombrase a la diplomática Ana María Menéndez para el cargo de representante especial para la violencia sexual en conflictos, pero finalmente fue designada asesora para Asuntos Políticos, un puesto con rango de secretaria general adjunta y dentro del nuevo Comité Ejecutivo de Naciones Unidas, pero sin apenas visibilidad internacional.

EL LIDERAZGO ESPAÑOL EN LA OPAQ

Así las cosas, en la actualidad la única presencia española de relieve dentro de la ONU es la de Fernando Arias como director de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), con sede en La Haya (Países Bajos) y que en los últimos años ha tenido un mayor papel en la escena internacional al recibir el Premio Nobel de la Paz en 2013 y tras haber participado en varias investigaciones en la guerra civil en Siria.

Precisamente, la OPAQ atrajo ayer la atención de los medios después de que Holanda anunciase que había evitado un ciberataque contra la red wifi de este organismo de la ONU, que en el pasado fue criticado por Rusia al denunciar que el régimen sirio utilizó armas prohibidas contra civiles durante la contienda.

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Tras el anuncio holandés, el resto de países europeos, así como EEUU y la OTAN, acusaron a Moscú de hacer ciberataques a escala internacional. «La espionajemanía está ganando impulso», respondió la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova.

El ciberataque revelado este jueves, cuya fecha exacta no ha trascendido, llevó a Holanda a deportar a Moscú el pasado 13 de abril a cuatro funcionarios rusos que habían aterrizado en Ámsterdam el 10 de abril y a los que se atribuye la autoría del acto de piratería cibernética.