Lehman Brothers, que dirigía en España Luis de Guindos, subió el precio de su oferta después de ganar un concurso del Ayuntamiento de Madrid para una emisión de deuda. En septiembre de 2007, tras vencer en el concurso por ser la oferta más barata, exigió y logró una subida del coste. El precio final fue superior al que ofrecían sus competidores en la oferta inicial.
El 19 de septiembre de 2007 el Ayuntamiento de Madrid otorgaba a Lehman Brothers una emisión de deuda municipal por valor de 200 millones de euros. La firma ganó porque el coste que debía pagar el consistorio era el menor de todas las ofertas: un 4,5283% de dicha suma.
Sin embargo, días después, el Ayuntamiento fijó, tras una negociación con el ganador, un coste del 4,6891%, porcentaje que superaba al de las cuatro firmas derrotadas inicialmente. MONCLOA.COM posee la documentación que acredita tal renegociación al alza del concurso.
Por esa pequeña diferencia de dígitos habían perdido un negocio multimillonario grandes entidades financieras como Commerzbank-La Caixa-RBS (ofertó un coste del 4,5546%), BBVA-Cajamadrid-DEFFA ACS BANK, que planteó un 4,5690%), BNP Paribas-Credit Suisse (4,5690%) o Deutsche Bank (4,5990%).
Por esas centésimas, en una puja donde pelearon 14 entidades financieras a través de siete ofertas, salió vencedora Lehman Brothers. Este banco norteamericano tenía como director en España desde 2006 a Luis de Guindos. Entre 1996 y 2004 había sido director general de política económica y secretario de Estado de Economía en los gobiernos de José María Aznar. Ana Botella era concejala en 2007 en el Ayuntamiento de Madrid cuando se produjo la adjudicación.
Pero tras el fallo se produjo una insólita renegociación de los términos del concurso ya cerrado y adjudicado. La renegociación de este contrato de emisión de deuda del Ayuntamiento de Madrid, tras la adjudicación, tuvo dos pesos pesados: por parte de Lehman Brothers, Íñigo Fernández de Mesa, y por parte del Ayuntamiento, Juan Bravo. Así consta en la correspondencia cruzada por este asunto.
Lo singular de estas maniobras tras fallarse el concurso es que para evaluar las ofertas el Ayuntamiento de Madrid hizo una dura criba del TIR que planteaba cada entidad. Y el consistorio no lo dudó. Decretó que Lehman Brothers era la más competitiva porque presentaba «un margen sobre referencia de menos de 1,8 puntos básicos, presentando también la menor TIR (4,582%) de todas las ofertadas en su modalidad».
Pero si la TIR era clave para puntuar, de hecho así figuraba en el cuadro resumen de las razones del fallo del concurso municipal, se entiende mal por qué tras ser elegida ganadora Lehman Brothers prosigue una negociación con el Ayuntamiento de Madrid sobre las condiciones del coste de la emisión de deuda.
Máxime cuando el Ayuntamiento, en su informe final de selección, ya apuntaba que se habían disipado todas las dudas: «Sobre la oferta de presentada por Lehman Brothers se solicitó aclaración respecto de si la oferta era firme y asegurada, términos que fueron confirmados vía fax; igualmente, se solicitó estimación de gastos de agencia de pagos, la cual fue remitida vía fax».
Por tanto, el 19 de septiembre de 2007, cuando la Concejalía de Hacienda de Madrid, cuyo titular era Juan Bravo, emite el informe de adjudicación ya sabe al céntimo, al milésimo, el coste de Lehman Brothers. Sin embargo, el 26 de septiembre, cuando dicho contrato ya ha sido adjudicado formalmente desde cinco días antes, ambas partes renegocian las condiciones.
Y el Ayuntamiento, por carta de Juan Bravo, comunica lo siguiente: «Les manifestamos nuestra conformidad a las condiciones fijadas en el día de hoy:» Coste para el emisor: 4,6891% (…) y demás términos y condiciones que figuran en el escrito remitido por Lehman Brothers de fecha 26 de septiembre de 2007 y que serán recogidos en el anexo I del contrato de aseguramiento y colocación a firmar en los próximos días».
En el expediente obra, en efecto, la carta de Lehman Brothers que contestó el Ayuntamiento el mismo día. Una modificación de la TIR que sólo tenía una pega: se hacía después de haberse eliminado a todas las entidades financieras del concurso y de haberse cerrado la posibilidad de pujar con mejores ofertas. Había ganado la oferta más barata, pero después, a través de despachos y cartas, se convirtió en la más cara.
Pero, además de desvirtuar el concurso, la diferencia de esos dígitos ofrecían una peaje distinto: con el porcentaje ganador, el Ayuntamiento debía abonar un peaje de 9.056.600, con el negociado y adjudicado posteriormente, 9.378.200 euros. Esto obligaba al consistorio madrileño a abonar 321.000 euros extra que se habría evitado de respetar su fallo inicial.
Fernández de Mesa, tras la aventura de Lehman Brothers, uniría sus destinos después con Guindos como ministro de Economía del Gobierno de Rajoy: sería su secretario General del Tesoro y Política Financiera. El banco internacional quebró en 2008 y generó un cataclismo internacional.
Este diario intentó contactar sin éxito con Juan Bravo para obtener su versión sobre esta modificación de los datos de la adjudicación de esta macroperación de emisión de deuda municipal en 2007.