La animadversión de Alberto Garzón por la Monarquía es de sobra conocida, pero el coordinador federal de Izquierda Unida aprovecha cualquier momento para refrendar su postura. En esta ocasión ha aprovechado un acto de Unidas Podemos para criticar la «regresión política y social» con un ejemplo curioso. «Hay gente por decir una realidad, como que los Borbones son unos ladrones, está siendo juzgada».
Así se ha expresado en un mitin de Unidas Podemos celebrado este miércoles en Parla junto a candidatos del partido a la Asamblea y a ese Ayuntamiento. Garzón ha señalado que en estas elecciones del 26 de mayo son muy importantes y ha preguntado a los asistentes si van a permitir que les quiten «conquistas conseguidas por el movimiento obrero» durante años o «que se instale la reacción a los derechos civiles hasta el punto de que hoy en España hay gente pasando por los juzgados diciendo una realidad como un templo: que los Borbones son unos ladrones.
Para el diputado en el Congreso, estos juicios «serían impensables incluso en los años 80». «En el renacer de la democracia sería impensable que un cantante por hacer un chiste sobre Carrero Blanco pudiera acabar en el Juzgado. Esa regresión política y social nos la estamos jugando hoy. Nos estamos jugando también los retos ecológicos, que tienen que ver con la sostenibilidad del planeta; o el reto del machismo y patriarcado, que sigue destrozando vidas con los asesinatos y otras manifestaciones de la vida cotidiana», ha dicho.
«EL ESTADO HA SIDO USADO PARA ROBARNOS EN BENEFICIO DE LOS QUE NO HAN PADECIDO LA CRISIS»
Alberto Garzón, en un acto de Unidas Podemos
Alberto Garzón ha pedido a los votantes «un esfuerzo más» para acabar con las últimas reformas laborales. «Esa reforma decía que buscaba empleo pero no creó ningún puesto de trabajo. El gobernador del Banco de España me reconoció años después que la reforma tenía como objetivo bajar salarios porque creía que cabrían por cada puesto de 1.400 euros se crearían dos puestos de 700. Y eso pasaba por acabar con la negociación colectiva, atacar a los sindicatos y en vez de negociar las condiciones laborales con todos tenemos que negociar individualmente frente a un gran empresario. Ese modelo se está instalando en las últimas décadas en toda Europa«, ha expuesto.
EN CONTRA DE LAS PRIVATICACIOONES
El líder nacional de IU ha criticado también la «estafa y el robo» de los recortes y privatizaciones de los servicios públicos «cuando había dinero para rescatar autopistas y a los empresarios que se decían liberales, pero que luego la gente pagaba sus pérdidas».
«El Estado ha sido usado para robarnos en beneficio de los que no han padecido crisis alguna, sino que han aprovechado estos años para enriquecerse. Hay una corrupción evidente como Púnica, Gurtel, Lezo, etcétera. Pero hay otro tipo de corrupción, que consiste en usar los fondos públicos para beneficio privado; es una corrupción legal, que se llama privatización, porque se deja sin recursos a la mayor parte de los trabajadores y se beneficia a los de siempre», ha declarado.
En este punto, Garzón ha señalado que en España no existe una clase empresarial liberal, sino «un feudalismo empresarial porque los dueños del Banco Santander o de OHL, ha puesto como ejemplo, transmiten sus empresas a sus hijos.
«Siguen dominadas por una élite que son pocas familias que tienen capacidad de hacer en los gobiernos. Cuando les va mal les dicen al Gobierno que es el momento de frenar la Sanidad, la Educación y un proceso saqueo que consiste en corrupciones ilegales y legales», ha apuntado.
Por ello, lo que desean es que Sol Sánchez e Isa Serra «se sienten delante de esas grandes empresas para decirles que se les acabó el chollo», porque van a revertir lo público. «En nuestro país es cada vez es más evidente de que las oportunidades de vida dependen del barrio en el que se haya nacido. Y eso solo se puede revertir fortaleciendo los servicios públicos y revertiendo las privatizaciones. La defensa de lo público es central», ha remarcado.
SALIR A LA CALLE Y CONVENCER AL OTRO
Alberto Garzón ha apostado también por tener un pie en las instituciones y otro en la calle porque «de nada sirve una sociedad organizada que quiera cambiar la realidad si no está en las instituciones» y viceversa; y también por la unidad entre Podemos e Izquierda Unida.
«Si Pablo Casado entrara por esa puerta, que Dios no lo quiera, y mirara a todos los que estamos aquí vería que para él somos lo mismo. Entre nosotros tenemos diferencias, pero para Casado o Botín nosotros representamos lo mismo. Si Patricia Botín dice que es mejor que Podemos e IU vayan por separado o que PSOE ha de pactar con Cs entonces debemos sospechar de que algo no va a bien. Botín cobra 29.000 euros al mes solo por ser presidenta del Banco Santander», ha esgrimido.
El diputado nacional de Unidas Podemos también ha pedido «sacar el instinto de clase», movilizarse en los barrios pobres para frenar a la derecha y otras «cuestiones heroicas con hablar con el cuñado facha de la familia».
«En España hay gente que vota a la derecha pero cuando conversas con ellos se dan cuenta de que no les interesa porque en España el sistema público está bien valorado y por eso siempre lo privatizan de forma indirecta. Y dejan de financiar los colegios para que la gente luego vaya al privado. Por eso os animo a que vayáis a votar. Mucha fuerza. No os vamos a fallar, lo tenemos claro. A convencer a todo el mundo. Salud y República», ha terminado.