Sánchez no se rinde: buscará apoyos en otra semana de reuniones

Pedro Sánchez no arroja la toalla. El líder del PSOE está empeñado en conseguir al menos la abstención de Ciudadanos o PP para afrontar una legislatura en minoría con apoyos puntuales. Para ello, y tras recibir el encargo del Rey, Sánchez ha convocado reuniones formales con los partidos con mayor representación en el Congreso (a excepción de Vox). Intentará cambiar la opinión de Rivera y Casado, que el jueves descartaron la opción de facilitar su investidura. Iglesias, en la recámara, puede ser su única opción junto a los separatistas.

En una rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa, ha dicho haber aceptado «con honor» el encargo del Rey de formar gobierno y ha subrayado que «no hay otro alternativa posible» a un Gobierno socialista. «O gobierna el PSOE o gobierna el PSOE», ha dicho.

Con el resto de formaciones políticas también se establecerán contactos pero serán en otro formato, ha señalado después de pedir a todos los partidos que actúen como lo hará el, con «altura de miras» y «enormes dosis de responsabilidad».

Sánchez ha manifestado su voluntad de gobernar buscando «grandes consensos» y «dialogando con todos», eso sí, «dentro del marco constitucional».

Preguntado por las posiciones que han ido avanzando las distintas formaciones políticas sobre su disposición o rechazo a facilitar una investidura de Sánchez tras su audiencia con el Rey, Sánchez ha dicho entender «todos los planteamientos» que se han hecho, pero ha incidido en que «no hay mayoría alternativa a la que propone» el PSOE.

De ahí que haya abundado en que las cuatro principales fuerzas políticas han de «encontrar ese punto de equilibrio a partir de cuáles sean las posiciones de cada cual para facilitar la formación de ese gobierno y echar a andar la legislatura».

«GRANDES ACUERDOS»

Preguntado si para facilitar su investidura los socialistas están dispuestos a favorecer que la coalición de derechas de Navarra Suma que forman UPN, PP y Ciudadanos gobierne la comunidad foral, ha señalado que, a pesar de que la socialista María Chivite mantiene el intento de formar una alternativa progresista, el PSN y el PSOE tienen la «misma posición», y es que «con Bildu no se acuerda nada».

Sánchez ha avanzado que el programa de gobierno que presentará en su investidura se centrará en cuatro ejes: la transición ecológica para que España se adapte al cambio climático; el impulso a la digitalización de la economía y la educación; la lucha contra la desigualdad y el fortalecimiento del proyecto común que representa Europa.

Ha reconocido que las transformaciones que precisa el país requerirán de «grandes acuerdos» en el ambito sociolaboral, educativo, en materia de pensiones y que exigirán en consecuencia consensos que trasciendan los límites de los proyectos de cada partido.