El PP guardó en un almacén durante años 78 radares de Tráfico

  • La DGT ha instalado ya 20 de los 78 radares que permanecían guardados en un almacén.
  • Los populares compraron estos radares entre 2015 y 2017.
  • La Guardia Civil de tráfico afronta las vacaciones con 9.100 agentes, 300 más que en 2018.
  • La Dirección General de Tráfico (DGT) instalará a lo largo de este año en España 78 radares nuevos. Así lo ha asegurado el pasado 27 de junio el ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska. De ellos, 20 ya están operativos para afrontar la primera operación salida de este verano. Y los restantes se colocarán en los meses restantes. Los dispositivos los compró el anterior Ejecutivo y los guardó en un almacén durante años. Ahora, la DGT los instalará en las carreteras, que este verano estarán vigiladas por 300 guardias civiles más.

    Estuvieron hasta cinco años bajo llave. De los 78 radares que Tráfico instalará en las carreteras, 27 autovelox se habían comprado en 2014 y el resto durante los tres años siguientes. Y todos ellos se quedaron cogiendo polvo en un almacén hasta ahora. Además de los autovelox, 15 de los dispositivos son de tramo y 36 son fijos. Solo 20 se han instalado para la operación salida de julio, los demás «irán entrando en servicio conforme se tengan las certificaciones del control metrológico», según ha detallado el ministro de Interior.

    El coste de estos dispositivos es elevado. El precio de cada radar de tramo es de aproximadamente 500.000 euros, el de los fijos ronda los 60.000 y el de los autovelox unos 70.000 euros cada uno. Pese a que las cifras pueden variar, el coste estimado de estos 78 radares fue de 11,5 millones de euros. Y el PP los dejó almacenados durante años. Ha sido el actual director de la DGT, Pere Navarro, quien de la mano de la operación salida de verano ha decidido sacarlos a la luz.

    Ya a principios de año la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, dio a conocer la cantidad de dinero que el Estado preveía recaudar a través de sus radares. La cifra asciende a 356 millones de euros. Y para que se cumplan las previsiones, los dispositivos deben estar en óptimas condiciones. Por ello, la DGT ha destinado un presupuesto anual de más de 1,3 millones de euros para el mantenimiento de los radares.

    Muchos de los dispositivos se instalarán en carreteras secundarias. En 2018, el 76% de los accidentes tuvieron lugar en este tipo de vías. Unos siniestros que Navarro achaca al exceso de velocidad. Por esta razón, la Guardia Civil dispondrá de los radares láser autovelox, unos dispositivos portátiles que se pueden colocar en cualquier vía. Además, la DGT pretende reducir la velocidad de las carreteras convencionales de 100 kilómetros por hora a 90.

    Los 58 radares restantes se instalarán según «llegue la certificación del centro de metrología», según detallan fuentes de la DGT. Sin embargo, la intención de Tráfico es más ambiciosa. El director destacó en una entrevista a MONCLOA.COM que el número de radares era muy inferior al de otros países europeos como Francia o Reino Unido. Y que había que aproximarse a la realidad de nuestros vecinos. Según sus declaraciones, Reino Unido dispone de 8.000 radares, Francia de 4.000 y España de 1.000.

    La otra gran novedad son las cámaras de alta definición. No por el hecho de instalarlas, que ya estaban, sino porque vigilarán el uso del móvil al volante. Una práctica cada vez más común responsable de muchos de los accidentes de tráfico. Además de estas cámaras, la Guardia Civil vigilará el uso del Whatsapp al conducir con furgonetas camufladas. Al ser más altas, pueden controlar si los conductores teclean desde el teléfono bajo el salpicadero.

    EL TRÁFICO VACACIONAL

    Ya ha llegado el verano. Y con él, los millones de desplazamientos vacacionales. Para afrontar la operación salida, la DGT ha desplegado un importante dispositivo que pretende asegurar que los españoles lleguen a sus destinos. Además de los 78 radares nuevos (de los que 20 ya se han instalado), Tráfico desplegará 12 helicópteros por todo el país (incluidas las Islas Canarias y Baleares), 216 cámaras de alta definición nuevas (que controlarán también el uso del móvil al volante) y 11 drones.

    La Guardia Civil vigilará con especial cuidado las carreteras. Además de los 9.100 agentes de tráfico (300 más para el verano), habrá más vehículos camuflados y se prevé realizar 900.000 pruebas de alcoholemia durante julio y agosto. Todo ello enmarcado en las tres campañas de control que la DGT lanzará desde el 1 de julio. Dos de las cuales se centrarán en proteger a los colectivos más vulnerables de la carretera: ciclistas (el 13 y el 14 de julio) y motociclistas (27 y 28 de julio).

    Cada vez hay más vehículos en España. Y más españoles que se van de vacaciones estos meses. Este verano la DGT estima que habrá 90 millones de desplazamientos de largo recorrido. Es decir, 1,5 millones más que en el mismo periodo del año anterior. Por ello, todos los fines de semana, Tráfico intensificará los controles. Además, los radares autovelox se moverán por diferentes puntos para controlar la velocidad, especialmente en las vías secundarias.

    Este despliegue no es nuevo. Responde a una realidad. En los meses de julio y agosto de 2018 aumentó un 15% el número de fallecidos en siniestros en las carreteras. El verano pasado murieron 260 personas y hubo 940 heridos. Unas cifras que la DGT quiere reducir a toda costa.