Íñigo Errejón ha aparcado los primeros pasos estructurales de Más Madrid para centrarse en evitar un Gobierno del PP en la Comunidad de Madrid condicionado por Vox. El exnúmero dos de Podemos ha llegado a insinuar que aceptaría con los brazos abiertos a tres tránsfugas de Ciudadanos para enfado de Ángel Gabilondo, que no quiere repetir el ‘tamayazo’.
La estrategia de Más Madrid recuerda al de la extinto Partido Democrático de la Nueva Izquierda, que nació en 1997 cuando tres diputados de Izquierda Unida desecharon rechazar la reforma laboral del PP de Aznar, que abarató el despido.
En 1999 el PDNI rompió con Julio Anguita y pactó con los socialistas para las elecciones municipales y autonómicas, con Cristina Almeida encabezando de forma fallida la candidatura PSOE-Progresistas en la Comunidad de Madrid. En 2001 Almeida, López-Garrido y otros miembros del PDNI ingresaban en Ferraz y dejaban atrás su proyecto fragmentador.
LA ESTRATEGIA DE ANGUITA Y LA DERROTA DE ERREJÓN
La apuesta del PDNI evidenció las dudas que existían en el seno de IU por la estrategia de su líder, Julio Anguita, que había mejorado los números de la coalición y que apostaba por la ‘teoría de las dos orillas’, situar a la misma distancia al PP y al PSOE para intentar el ‘sorpasso’ sobre los socialistas.
Pero esta estrategia forzó a que algunas abstenciones de los herederos del PCE provocasen triunfos de Aznar, lo que provocó que algunas voces comunistas denunciasen la ‘estrategia de la pinza’ entre IU y el PP que el tantas veces PDNI insinuó.
El nacimiento del PDNI como fuerza surgió tras la derrota de su matriz, ‘Tercera Vía’, en la V Asamblea de Izquierda Unida, en la que Anguita logró 966 apoyos. La ‘Nueva Izquierda’ tan solo logró 102. Una derrota más honrosa logró Errejón ante Iglesias en Vistalegre II, pero el paralelismo está servido.
MONEDERO YA LO DENUNCIÓ EN 2016
Juan Carlos Monedero denunció en ‘Las Mañanas de Cuatro’ la estrategia de Errejón, cuyos partidarios recogieron firmas para pedir un Congreso abierto para que surgiese un Podemos ganador: «El sector errejonista, (que no es Errejón que es mucho más listo) está importando aquello que supuso el problema principal en IU, que era que lo que no eran capaces de ganar internamente, salían a defenderlo en los medios de comunicación.
El politólogo hacía memoria: «Recuerda lo de Nueva Izquierda en Izquierda Unida, era gente que en la interna perdió ¿y qué ocurrió? pues que aprovechó el espacio que le daba el diario El País, porque a El País le interesaba más una IU moderada, una IU que fuera un pulmón e oxígeno para el PSOE, que una IU que confrontara. ¿Qué está pasando ahora? que hay sectores del errejonismo que están jugando a eso, y entonces te encuentras que hace críticas hacia afuera que no se sostienen».
Monedero no se cortaba: «El sector errejonista apostó muy fuerte en Madrid, Barcelona y Andalucía, y ha perdido. Tendrá que asumir la pérdida. Tendrá que asumir que tiene el poder interno que tiene. Me parece que es deshonesto con el partido que después de haber perdido dentro, quieras salir a los medios de comunicación a defender o hacer valer lo que has perdido dentro. Aprovechando que los medios de comunicación te van a dar espacio porque eso supuestamente debilita el partido».
IGLESIAS SIGUE APOSTANDO POR UN GOBIERNO DE COALICIÓN
El secretario general de Podemos sabe que podría cortar el paso al salto estatal de Más Madrid si consigue un pacto de legislatura con el PSOE. Iglesias explicaba en La Vanguardia que Pedro Sánchez le había dicho «todas las veces que hemos hablado durante el mes de junio, que apostaría por un gobierno de coalición con nosotros si sus diputados y los nuestros sumaran mayoría absoluta en el Congreso. Pero al no sumar juntos esa mayoría, me decía el presidente, sería casi imposible lograr los apoyos suficientes para sacar adelante la investidura».
Iglesias afirma querer «evitar que un mecanismo institucional tan importante como la investidura se convierta en una escenificación fallida, algo que la democracia española no merece. Pensamos que lo más sensato para sacar adelante la investidura es lograr un acuerdo integral de gobierno de coalición».
Y recuerda: «La amenaza de repetición electoral que por desgracia hemos escuchado a algunos exponentes del PSOE, además de suponer una falta de respeto a los ciudadanos, daría la oportunidad a las derechas de recuperar el poder».