La ministra de Economía en funciones, Nadia Calviño, ofreció las primeras pistas de su candidatura a dirigir el Fondo Monetario Internacional (FMI), en una entrevista en el programa Hoy por Hoy de la Cadena SER. El elocuente silencio de Calviño -tardó cuatro segundos en responder- a la pregunta de si el presidente la postularía para el cargo, resultó una respuesta más que esclarecedora, que se confirmaría horas después.
Más tarde, Moncloa confirmaba que se barajaba el nombre de la titular de Economía entre los candidatos a la gerencia del FMI,. En este sentido, el Gobierno de Pedro Sánchez ha considerado un «honor» que Nadia Calviño, figure en la lista de favoritos para sustituir a Christine Lagarde, al frente del organismo internacional.
España «siempre» ha apoyado que la nueva dirección del FMI recaiga «en una mujer europea de reconocido prestigio»
El Ejecutivo en funciones se felicita así después de que haya trascendido la iniciativa de los miembros europeos del G7 -que aglutina a Estados Unidos, Alemania, Canadá, Reino Unido, Japón, Francia e Italia- para promover un grupo de candidatos a la dirección del FMI en la que ha sido incluida Calviño.
En este sentido, fuentes de Moncloa han subrayado que para el Ejecutivo es «un honor» que «la valía y competencia de sus integrantes sea reconocida a nivel internacional« y ha incidido que supone «una buenísima noticia para España» que la ministra Calviño «sea considerada entre el reducido grupo de personas que podría dirigir uno de los principales organismos financieros internacionales, como es el FMI.
Tras agradecer a los países europeos integrantes del G7 (Reino Unido, Francia e Italia) que hayan sugerido el nombre de la ministra española como candidata, desde Moncloa han destacado la importancia de «mantener la unión de acción» entre los países de la Unión Europea para seguir optando a la dirección del FMI.
Finalmente, ha recordado que España «siempre» ha apoyado que la nueva dirección del FMI tras la marcha de Lagarde recaiga «en una mujer europea de reconocido prestigio». El nombramiento se hará efectivo el próximo 12 de septiembre. Nos llena de orgullo que Nadia Calviño haya sido incluida en este grupo de candidatos, convirtiéndose en exponente de las políticas de igualdad de género que este Gobierno está impulsado bajo la Presidencia de Pedro Sánchez», han destacado fuentes de Moncloa.
La ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, ha destacado que Calviño es «una magnífica candidata». Está absolutamente preparada, es inteligente, conoce muy bien el funcionamiento global de Europa«, ha incidido la titular de Hacienda, que ha admitido que sentiría «cierta pena» de perder a su compañera en el Consejo de Ministros.
UN SUSTITUTO EUROPEO PARA LAGARDE
Calviño ya avanzaba hace unos días la importancia de que la persona que sustituyera a Lagarde al frente del FMI, cuándo ésta asuma la presidencia del Banco Central Europeo (BCE), fuera un candidato europeo. De hecho Calviño advertía que para Europa era una cuestión prioritaria.
«Desde el punto de vista español y creo que desde el punto de vista de todos los Estados miembro, la prioridad es que el director gerente del FMI siga siendo un europeo«, declaraba Calviño a su llegada a una reunión de ministros de Finanzas de la zona euro (Eurogrupo).
Fuentes europeas señalaron ese mismo día -8 de julio- que los países del bloque tienen una «fuerte urgencia» por presentar un candidato, por lo que el presidente del Eurogrupo, Mario Centeno, y la presidencia de turno europea que estrena Finlandia trabajan en ello, a pesar de que el proceso formal para el relevo de Lagarde no ha comenzado.
En la misma línea, la ministra Calviño consideraba «posible» que los europeos empiecen la «reflexión» aunque sea de forma informal sobre este asunto, al tiempo que señalaba que en esta cuestión la posición española era clara respecto a que «el director gerente siga siendo un europeo».
Entonces Calviño eludía pronunciarse y a la pregunta de si ella misma se veía como candidata para relevar a Lagarde, esquivaba la respuesta directa, aludiendo que considera «prematuro» hablar de nombres.
