La campaña de incendios en Madrid se apaga con los bomberos forestales en huelga

La campaña de alto riesgo de incendios que da trabajo a los bomberos forestales (personal laboral público) de la Comunidad de Madrid toca a su fin. “Los incendios se apagan en invierno” parafraseaba José Luis Heredero, el portavoz del Comité de Huelga, cuando anunciaba el paro indefinido de estos profesionales reivindicando su continuidad laboral durante todos los meses del año, entre otras mejoras.

Pero, por lo pronto, lo único que se va a apagar el próximo invierno va a ser la huelga de estos bomberos forestales, y no porque ellos vayan a renunciar a su protesta, sino porque su período laboral de cinco meses y medio –seis meses el próximo año- se cierra sin acuerdo. El 15 de septiembre entregan material y comienzan sus vacaciones y el 8 de noviembre se da por finalizada su relación contractual con la Comunidad de Madrid, hasta el año que viene…o no.

En palabras de uno de estos bomberos forestales, Raúl Callejas, “en noviembre todo un colectivo de profesionales estará a las puertas del INEM, cuando debería estar desbrozando, limpiando monte, habilitando cortafuegos, inspeccionando vías pecuarias y barreras de acceso, repoblando vegetación, gestionando combustible herbáceo y creando biocombustible”, en definitiva, participando en una “gestión integral del medio natural”. Callejas criticaba la falta de respuesta a sus reivindicaciones por parte del PP de Madrid, de nuevo en el gobierno regional, “no vaya a ser que se desmonte el negocio que tienen montado con el fuego”, en clara alusión a la privatización de parte del servicio.

Estos bomberos forestales iniciaron una huelga para luchar por unos derechos laborales que vinculan a un cambio en la gestión forestal

El 11 de septiembre, estos bomberos forestales iniciaron una huelga indefinida para luchar por sus derechos laborales que ellos mismos vinculan estrechamente a un cambio de modelo en la gestión forestal, que contemple “mejores políticas en materia de prevención y protección de los montes y bosques de la Comunidad de Madrid”, explicaba el portavoz del Comité de Huelga.

Este colectivo reclama formar parte del operativo forestal de prevención durante el invierno, algo que, en su opinión, no sólo redundaría en una labor más eficiente en la conservación de los recursos del bosque y en la extinción de incendios, sino que además contribuiría a mejorar su estabilidad profesional y sus condiciones laborales.

Paros en el monte, concentraciones en el corazón de la ciudad, recogida de firmas, apertura de una ‘caja de resistencia’ para paliar las consecuencias económicas para los trabajadores en huelga… En resumen, un mes de movilizaciones y actos reivindicativos, pero sin éxito. Estos bomberos forestales terminan la campaña de incendios como la empezaron, sin ningún avance en la negociación de sus demandas. Se irán a casa con la misma incertidumbre de todos los años.

Bomberos Forestales CAM movilizaciones
Huelga Mundial por el Clima, manifestación de Madrid, 27 de septiembre

APOYOS A LAS REIVINDICACIONES DE LOS BOMBEROS FORESTALES

Más allá de las condiciones estrictamente laborales, al tratarse de una reivindicación fuertemente ligada a la prevención de incendios,  la protesta ha encontrado algunos apoyos, no muchos, entre los parlamentarios de la Comunidad de Madrid que defienden otro modelo de gestión: “los bomberos responsables de las labores de prevención, conocen cada cortafuegos, cada camino forestal, las vaguadas, la ubicación de las masas forestales más tupidas, y todo eso permite que un pequeño incendio pueda quedar en conato”, explicaba a MONCLOA.COM, Alejandro Sánchez, diputado de Equo (en Más Madrid), en la Asamblea regional.

Isa Serra, portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, también se ha posicionado a favor de las demandas de estos profesionales: «nos hemos reunido con los bomberos forestales de la Comunidad de Madrid (CAM) para mostrarles nuestro apoyo”. La portavoz de la formación morada en Madrid arremetía contra el partido en el Gobierno manifestando que, “nos parece una vergüenza que cada vez que se produce un incendio los cargos del PP de la CAM aparenten preocupación cuando llevan años que no dejan de recortar personal, precarizar condiciones de los bomberos forestales, y degradar el sistema público de prevención y gestión de incendios privatizando los servicios”. Serra rechaza el sistema mixto –público-privado- por el que se gestiona el servicio, “necesitamos apostar por la prevención y garantizar un sistema 100% público, tanto en prevención como en extinción de incendios porque no valen discursos vacíos respecto al cambio climático, necesitamos políticas concretas”, aseguraba en esta línea.

Isa Serra Bomberos Forestales CAM
La portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid en una de las concentraciones convocadas por los bomberos forestales en huelga, en la Puerta del Sol, los días 24 y 25 de septiembre.

Y aunque los bomberos forestales en huelga han entregado en mano y por escrito una solicitud de reunión a cada una de las fuerzas políticas con representación en el parlamento regional, no han obtenido respuesta de ningún grupo.

UNA NEGOCIACIÓN QUE NACE FRACASADA

Desde la Dirección General de Emergencias (DGE) de la Comunidad de Madrid (CAM), de la que dependen estos bomberos forestales, han reiterado su disposición a escuchar a los trabajadores. De hecho, ha habido un par de acercamientos, el primero, el día 5 de septiembre, cuando el director general de Emergencias de la CAM, José Luis Villarroel, recibió al Comité de Huelga para fijar de inmediato unos servicios mínimos. El segundo, el 13 de septiembre, cuando el responsable de Emergencias mantuvo una entrevista “informal”, tras la primera concentración de los trabajadores, frente a la sede de la Dirección General, en Las Rozas.

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Sin embargo, fuentes de la Administración consideran que el principal escollo para iniciar una negociación ha sido la falta de reconocimiento, por parte de los bomberos forestales, de la legitimidad de los representantes sindicales del Comité de Empresa como interlocutores válidos.

Además, las mismas fuentes han asegurado a MONCLOA.COM que este colectivo “no pide mejores condiciones laborales, sino trabajar todo el año, y eso significa un cambio de trabajo, algo que no se puede hacer sin la intervención de una representación sindical o sin que medie un concurso público de oposiciones”, puesto que en caso contrario se vulneraría el derecho de los trabajadores a optar a puestos públicos en igualdad de condiciones. Un proceso de oposiciones que la Administración denomina “de estabilización” y que para los bomberos en huelga no es más que “un ERE encubierto”, puesto que a la mayoría le avalan muchos años de experiencia.

Por otro lado, desde la DGE consideran que “los trabajadores en huelga son una minoría –calculan que un 10%- y no deben arrogarse la capacidad de representar a todo el colectivo” de bomberos fijos-discontinuos, e insisten en la idea de que “lo básico en una negociación es reconocer la legitimidad sindical” y si quieren cambiar de trabajo y optar a un puesto fijo, deben acceder a través de una oposición que “garantice” un proceso de selección justo y en igualdad.

De momento, el proceso está enquistado y sin visos de desbloqueo. Parece que, al igual que ocurre con los siniestros forestales, el incendio laboral de los bomberos forestales de la Comunidad de Madrid, tampoco se apagará en invierno.