Un bebé de tan solo nueve meses falleció el pasado mes febrero en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid. La muerte se produjo después de que los facultativos le administraran por error una dosis de medicamento 10 veces superior a lo prescrito.
El niño había sido sometido meses antes, en noviembre de 2018, a un trasplante de corazón, y necesitaba la administración de micofenolato oral. El bebé necesitaba 100 mg de medicamento y se le suministró 1 gramo, es decir, diez veces más de lo necesario, lo que provocó su muerte varios días después. Los padres del menor denunciaron al centro hospitalario, que reconoció el error.
La denuncia de los progenitores fue presentada ante el Juzgado de Instrucción número 10 de Madrid, que investiga el caso como presunto homicidio imprudente por negligencia profesional.
MURIÓ DIEZ DÍAS DESPUÉS DEL ERROR POR UNA NECROSIS INTESTINAL
El bebé, que en el momento del fallecimiento tenía 9 meses, nació con problemas cardíacos, lo que le llevó a ser intervenido para un trasplante de corazón, el cual se realizó en el mismo centro hospitalario madrileño.
La intervención se saldó con éxito, pero en su proceso de recuperación se cometió un error que fue fatal para el pequeño. Durante el mismo se le suministró por vía oral y de manera accidental, el micofelonato, un inmunosupresor que se emplea habitualmente en pacientes con trasplantes, en una cantidad muy superior a la prescrita.
El bebé falleció diez días después del error a causa de una necrosis intestinal. Aunque los médicos se dieron cuenta del error y trataron de revertir los efectos de la sobredosis de medicamento, no fue posible.
El Juzgado de Instrucción número 10 de Madrid investiga si el error fue cometido por el médico al prescribir la dosis de una manera incorrecta o si fue la enfermera al administrarla de una manera indebida.
SE TRATÓ DE REVERTIR LOS EFECTOS DE LA SOBREDOSIS
Después de que los facultativos se diesen cuenta del error, trataron de revertir los efectos de la sobredosis sin éxito. Para ello, hicieron uso de carbón activado y colestiramina. Sin embargo, pese a sus intentos por salvarle la vida, no fue posible.
La dosis diez veces superior a la indicada le provocó una necrosis intestinal, una isquemia, la cual acabó derivando en su fallecimiento poco más de una semana después.
En la historia clínica se asocia de una manera directa el fallecimiento con la sobredosis de medicamento. Varios profesionales aluden en el mismo al «error» cometido, e indican la necesidad de vigilar al menor por una sobredosificación de micofelonato.
En el informe clínico conocido tras el fallecimiento del menor se hace referencia a los efectos bruscos que tuvo el error sobre el bebé. Estos provocaron la intervención de los médicos, que tuvieron que poner ventilación mecánica en él apenas unas horas después del exceso de dosis.
El diagnóstico fue isquemia intestinal, que se produce al morir el tejido intestinal por carecer de un suministro sanguíneo en su zona, así como gastritis aguda con hemorragia.
SIN AYUDA PSICOLÓGICA PARA LOS PADRES
La asociación del Defensor del Paciente ha mostrado su lamento porque, desde el Hospital Gregorio Marañón, no se le haya ofrecido la debida explicación a los padres del bebé fallecido. También por la ausencia de ayuda psicológica para ayudarles a hacer frente a este duelo.
Desde el propio hospital, así como desde la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, han evitado realizar declaraciones al respecto de este caso. No obstante, sí han reiterado su voluntad para su colaboración con la justicia durante la instrucción de la causa.
INFARTO INTESTINAL
La isquemia intestinal, también conocida como necrosis intestinal o infarto intestinal, es la muerte del tejido del intestino que se debe a una interrupción del suministro sanguíneo. Habitualmente, se ocasiona de forma precedida por una sintomatología de angina intestinal. Esta degenera en isquema, lo que causa diferentes efectos generales, entre ellas la filtración de bacterias.
Algunos de los síntomas asociados a un infarto intestinal como el sufrido por el bebé madrileño son la diarrea, la fiebre, los vómitos y el dolor abdominal. Como signos clínicos se encuentran la leucocitosis y una leve acidosis.
Este problema debe ser tratado con prontitud, recurriendo en muchos casos a la cirugía. Se trata de una afección que puede llegar a provocar la muerte, como ha ocurrido en ese caso.
CONDENA POR NEGLIGENCIA MÉDICA
El Derecho Penal español cuenta con diferentes delitos que pueden estar cometidos por personal sanitario al ejercer su profesión. Estos se pueden dividir entre los dolosos, que son cometidos con intención o voluntad, o imprudentes. Estos últimos son los que se cometen por error, como ha ocurrido en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid con el menor de apenas 9 meses de edad.
El juzgado de instrucción trabaja para esclarecer los hechos y determinar al responsable del fallecimiento del bebé. En este caso, para conocer la pena, habría que acudir al artículo 142.1 del Código Penal. En este se hace referencia al delito de homicidio por imprudencia grave.
De acuerdo al mismo, aquel que por una imprudencia grave cause la muerte de una persona, será castigado como reo de homicidio imprudente. La pena en estos casos es de prisión de uno a cuatro años.
Además, si el homicidio se comete a causa de una imprudencia profesional, lleva asociada la pena de inhabilitación. Esta impide, en este caso, el poder ejercer su profesión, oficio o cargo por un periodo de tres a seis años.
En el caso de que se considerase un delito de homicidio por imprudencia menos grave, la pena se reduciría. En este caso, la pena es de multa de tres a dieciocho meses. Si es considerada una imprudencia de este tipo no llevaría asociada ninguna inhabilitación.
PENA DE MULTA O PRISIÓN Y/O INHABILITACIÓN
En este tipo de casos, para determinar el tipo de imprudencia, si es grave o menos grave, viene determinada por el nivel de impericia o imprudencia que el sanitario muestre, no por el resultado. En función de las mismas se determinará si la condena es en forma de prisión o multa y si también implica, o no, su inhabilitación.
Tras darse a conocer los detalles acerca del fallecimiento del bebé en el pasado mes de febrero en Madrid, ahora habrá que esperar a que el caso se resuelva para conocer quién es el responsable del fallecimiento. También se tendrá que determinar, en función de lo mencionado, el tipo de imprudencia, y la pena correspondiente.