Nueve días después de la debacle morada del 26-M Pablo Iglesias aparcó su ensimismamiento y comenzó a escuchar a su alrededor: el secretario general de Podemos pegó un golpe en la mesa, en parte para no socarrarse, y decidió que Pablo Echenique dejase la secretaría de Organización tras tres años y dos meses en el cargo.
Echenique había accedido al número dos de Podemos tras haber militado en Ciudadanos y tras haberse sumado a los morados en 2014, después de varios años realizando un blog sobre la inclusión de las personas que sufren discapacidad.
Este científico se convirtió en eurodiputado, lideró a Podemos en Aragón en las autonómicas de 2015 y se convirtió en el gran icono de los anticapis, que se enfrentaron contra Pablo Iglesias en Vistalegre I. Pero Iglesias se distanció de Errejón y lo reclamó para Madrid, hecho que posibilitó que Echenique realizase otra pirueta ideológica.
APARTADO DE LA SECRETARÍA DE ORGANIZACIÓN
Iglesias apostó por Alberto Rodríguez al frente de la secretaría de Organización tras años escuchando quejas de provincias contra su dejadez y autoritarismo. Echenique recibía como premio de consolación el área de Acción de Gobierno, Institucional y Programa de Podemos.
Pero su estreno, al frente de la negociación de la investidura, no pudo ir peor y Pablo Iglesias lo reconoció en una reciente entrevista: «Después de que yo me retirara, cuando Pedro Sánchez dijo: el único escollo para que haya un Gobierno de coalición en España es Pablo Iglesias. Yo entonces me retiré y a partir de ahí Pedro me escribió, me dijo vamos a desbloquear, negociemos tú y yo. Y yo le dije: mira, creo que es mejor que negocien Echenique y Calvo».
Iglesias reconoció que «la negociación fue muy difícil y cuando recibí la llamada de Pedro Sánchez a las siete de la tarde pensé, me va a decir vente a Moncloa, y aunque nos tengamos que quedar hasta las dos de la madrugada, sacamos esto adelante como hicimos con los Presupuestos».
El palo a Pablo Echenique quedaba claro: «Pero sin embargo me dijo: es la última oferta y no me voy a mover de aquí. Entonces, luego, muchas veces he pensado ¿si hubiera ido yo desde el principio esto habría salido mejor? No lo sé».
ECHENIQUE, CONTRA LAS CUERDAS
La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Aragón desestimó el pasado mes de septiembre los motivos de impugnación presentados por Echenique contra el fallo que lo condenaba por contratación irregular de su asistente.
Pablo Iglesias le echó hace unos días un capote en Cuatro: «Estoy convencido que el Tribunal Supremo le va a dar la razón, creo que no cometió ninguna irregularidad y su situación es la de muchas personas que están en situación de dependencia».
El secretario general de Podemos obvió que Echenique incumple el código ético de Podemos, que obliga a la «renuncia al cargo público, al cargo interno o a cualquier candidatura en caso de ser procesado o condenado por las faltas o los delitos que se determinarán en el reglamento que a tal efecto publicará la Comisión de Derechos y Garantías».
Este reglamento deja claro que Echenique debería dejar su candidatura porque el reglamento «en cualquier caso incluirá siempre los delitos de corrupción, los económicos, el acoso sexual, las violencias machistas, la pederastia y el maltrato infantil, así como los delitos contra los derechos de los trabajadores, los ecológicos y los urbanísticos».
DE AQUELLOS POLVOS…
Pablo Echenique dejó en abril de 2017 la política aragonesa, pero no pudo lograr que su candidata más afín le sucediese al frente de Podemos Aragón: Erika Sanz cayó por más de 27 puntos contra Nacho Escartín, que no traga a su antecesor.
Escartín dejó claro antes de las generales de abril que no tiene ningún tipo de sintonía con Iglesias: «La lista de Aragón la hizo con aspirantes poco conocidos, con poco arraigo. Una lista desde Madrid nunca es igual de querida por los territorios que si las pudiéramos hacer desde aquí».
Y tampoco con Echenique, al que exigió ‘sacrificar’ para contribuir a una negociación con la Chunta Aragonesista, que finalmente ha firmado con Más País e intentará dejar a Podemos sin su único escaño por Zaragoza.
MALAS PREVISIONES PARA ECHENIQUE… Y TAMBIÉN PARA MÁS PAÍS
La mayor parte de las encuestas publicadas pronostican que Más País y la Chunta Aragonesista no lograrán un escaño por Zaragoza. Sin embargo la irrupción de esta lista podría posibilitar la pérdida del escaño de Pablo Echenique, que podría dejar a Unidas Podemos sin representantes por Aragón en el Congreso.
Más País ha decidido no presentarse por Huesca, por lo cual la Chunta Aragonesista lo hará en solitario. Esta formación nacionalista y socialdemócrata, similar a lo que fue Eusko Alkartasuna en Euskadi o lo que es Compromís en la Comunidad Valenciana, no peleará en Teruel por respeto al salto a la política de la plataforma cívica Teruel Existe tras veinte años de lucha.
