Cuarenta años después de que fuera enterrado con honores en el mausoleo que él mismo construyó, este jueves el dictador Francisco Franco abandonaba el Valle de los Caídos. Un acontecimiento, histórico para España, que PP, Ciudadanos y Vox han intentado que pasara desapercibido. Los tres partidos han preferido no resaltar la noticia de la exhumación y en su lugar han dado protagonismo a los datos de la EPA publicados esa misma mañana.
Los tres líderes de sendos partidos, Pablo Casado (PP), Albert Rivera (Ciudadanos) y Santiago Abascal (Vox) han afeado al Gobierno que estuviera preocupándose más por la exhumación y posterior inhumación del dictador, antes que por los datos que arrojaba el paro, que ha anotado un aumento.
EL PARO, EL PROTAGONISTA
El primero en criticar al Ejecutivo de Pedro Sánchez ha sido Albert Rivera durante una entrevista en el programa de Ana Rosa. El líder de Ciudadanos ha manifestado que prefiere hablar de otros temas como que “España es el país con más paro y precariedad de Europa junto a Grecia y Polonia” en lugar de recordar a Franco cuando “el 65% de los españoles que votan el 10-N” no han sufrido la dictadura. Rivera ha indicado que para él este día no es histórico, sino que lo fue cuando se aprobó la Constitución.
Pablo Casado ha vivido la exhumación desde fuera de Madrid, concretamente se encontraba de viaje en Léon. El presidente del Partido Popular ha optado por el hermetismo en todo lo referente a la cuestión Franco. Siguiendo con el papel de discreción que ha puesto en práctica durante toda la pre-campaña, Casado se ha limitado a asegurar a sus votantes que preservará “la Transición y concordia”.
El líder del PP, sin embargo, sí ha comentado los datos publicados por la EPA. Casi a la misma vez que Rivera, Casado ha señalado al Gobierno de Sánchez por llevar al país “a otra crisis, tras el peor verano para el empleo desde 2012”. El dirigente popular ha añadido que “la propaganda no resuelve los problemas de los españoles” y ha afirmado que “siempre que gobierna el PSOE vuelve el paro y el despilfarro”.
Por su parte, el presidente de Vox, Santiago Abascal, es el que se ha mostrado más crítico con la exhumación desde el principio. El representante del partido de extrema derecha ha asumido el mensaje de los otros dos líderes y ha compartido un titular sobre la bajada de ritmo en la creación de empleo criticando que “Sánchez tiene otras prioridades”.
Sánchez tiene otras prioridades. pic.twitter.com/n7QbFBF4dS
— Santiago Abascal (@Santi_ABASCAL) October 24, 2019
CRÍTICAS A LA EXHUMACIÓN
Además de escudarse en el paro, el líder de Vox ha aprovechado la ocasión para cuestionar nuevamente la exhumación. «El objetivo no es desenterrar a Franco. El objetivo es deslegitimar la Transición, deslegitimar la Corona, derrocar a Felipe VI y derribar la cruz del Valle de los Caídos», ha aseverado.
Abascal ha calificado el acto como un “show electoral y necrófago” y ha llamado a Sánchez “el carroñero de La Moncloa”. Entre sus críticas, también ha arremetido contra PP y Ciudadanos por, a su juicio, mantener un “silencio cómplice”. El presidente de Vox ha ironizado con que “ahora irán a por la Cruz, esparciendo el odio desde las instituciones, y todos seréis responsables”.
El secretario general del partido, Javier Ortega Smith, ha sido otro de los que se ha posicionado en contra de la exhumación. El madrileño ha recuperado las palabras que ya pronunció Abascal y ha insistido en que “Sánchez es muy valiente con los muertos, pero no con delincuentes como Torra”. Rocío Monasterio, la líder de Vox en Madrid, ha lamentado que “la exhumación de Franco” se ha convertido en “la última traición al legado de la Transición”.
Por su parte, en el PP, Isabel Díaz Ayuso, presidente popular de la Comunidad de Madrid, ha roto nuevamente con el perfil moderado de Casado. Durante la sesión plenaria en la Asamblea, la madrileña ha calificado de “necroshow” la exhumación y ha mantenido que “no le daría ni un solo titular”. Ayuso fue a principios de mes muy criticada por unas declaraciones en la misma Cámara en las que se preguntaba qué pasaría después: “¿Será lo siguiente la Cruz del Valle, todo el Valle, las parroquias del barrio arderán como en el 36?”.
En Ciudadanos, además de las palabras del presidente de la formación, la portavoz en el Parlament de Cataluña, Lorena Roldán, ha calificado de “show mediático” el acontecimiento. La dirigente catalana ha tachado de “lamentable” que la fecha elegida sea en periodo electoral y ha cuestionado que Sánchez esté “más cómodo hablando de Franco que de los problemas que afectan a los españoles».