Villarejo cumple dos años de prisión inmerso en una macrocausa que no para de crecer

  • El 'caso Tándem', en el que es el principal investigado, cuenta con 17 piezas separadas.
  • El juez acordó la semana pasada prorrogar su prisión preventiva dos años más.
  • Este lunes anunció que ha denunciado a los dos fiscales anticorrupción que llevan la causa.
  • El excomisario José Manuel Villarejo cumple hoy dos años en prisión preventiva inmerso en una macrocausa cuya instrucción se encuentra aún lejos de concluir, con un total de 17 piezas separadas abiertas en la Audiencia Nacional, y con ingentes cantidades de material incautado todavía por desencriptar. 

    El titular del Juzgado de Instrucción Número 6, Manuel García-Castellón, acordó la semana pasada prorrogar la privación de libertad del antiguo policía hasta un máximo de dos años más mientras continúa investigando el ‘caso Tándem’, más conocido como ‘caso Villarejo’, que indaga en las denominadas cloacas del Estado.

    A lo largo de estos dos años en el penal madrileño de Estremera, Villarejo se ha convertido en un personaje habitual en el candelero mediático, con cada vez más ramas de investigación abiertas en torno a la multitud de actividades presuntamente ilícitas que realizó a cambio de cifras millonarias durante tres décadas como miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. 

    ¿CÓMO EMPEZÓ TODO?

    En 2017 el abogado Francisco Menéndez revela a la Fiscalía Especial Anticorrupción los trabajos que había realizado el excomisario para unos clientes de Guinea Ecuatorial, que pidieron sacar a la luz los trapos sucios de uno de los hijos del presidente de ese país, Teodoro Obiang.

    Esta denuncia da lugar a la pieza separada número 1 de la causa, conocida como ‘King’, y supuso el detonante y el hilo a partir del cual se fue desgranando toda la operación ‘Tándem’.

    En noviembre de ese mismo año, la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela, encargada de la instrucción por aquel entonces, mandaba a prisión Villarejo junto con el también excomisario Carlos Salamanca y el abogado Carlos Redondo.

    Sin embargo, tanto Salamanca como Redondo se encuentran ya en libertad, el primero desde cinco meses después de su ingreso en Estremera y el segundo desde septiembre de 2018, por lo que Villarejo es el único al que se le sigue aplicando la medida cautelar de privación de libertad como principal investigado de la trama.

    A raíz de la mentada denuncia se tuvo conocimiento de un entramado criminal centrado en torno a las empresas del Grupo empresarial CENYT (Club Exclusivo de Negocios y Transacciones) propiedad de Villarejo, dirigido a la mediación e intercambio de información de carácter personal.

    El acceso a esta información estaba restringido a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado lo que le permitió a Villarejo, como miembro de estas e investigador privado al mismo tiempo, el tráfico de dicha información con terceros.

    A raíz del conocimiento de estos hechos así como del análisis de los efectos informáticos intervenidos en los registros realizados a Villarejo, tal y como apunta el juez García-Castellón a cargo actualmente de la instrucción, se tuvo conocimiento de “otros tantos proyectos o negocios que constituían su actividad habitual”.

    MÁS DE TREINTA DELITOS 

    A medida que se han ido abriendo nuevas líneas de investigación, un total de 17, se le han atribuido a Villarejo más de treinta delitos como organización criminal, blanqueo de capitales, cohecho, tráfico de influencias, falsedad documental o revelación de secretos.

    En el auto de prórroga de prisión a Villarejo, el juez hizo un resumen del contenido de las seis piezas que no están archivadas ni bajo secreto de sumario que son la ya mentada ‘King’; la 2, conocida como ‘Iron’, que investiga el espionaje a un bufete de abogados; la 3 (‘Land’), sobre el espionaje en el seno de la familia Cereceda, promotores de la lujosa urbanización La Finca de Madrid; la 4 (‘Pit’), en torno a una extradición en Guatemala; la 6 (‘Pintor’), por la extorsión a un exjuez; y la 8 (‘Marbella’) de espionajes a empresarios de la localidad malagueña de Marbella.

    De este modo, el juez no hizo mención alguna a la pieza la número 5 (‘Carol’) sobre las revelaciones de Corinna zu Sayn-Wittgenstein y la 11 de revelación de secretos, que fueron archivadas, así como las que están bajo secreto: 7 (‘Kitchen’) -que el juez reactivó el pasado día 28 con el requerimiento a este periódico de las grabaciones que evidencian la relación entre Villarejo y la ex secretaria general del Partido Popular María Dolores de Cospedal– 9 (‘BBVA’), 10 (‘Dina’), 12 (‘Planeta’), 13 (‘delitos fiscales’), 14, 15, 16.

    Además, García Castellón abrió la semana pasada, con posterioridad a la emisión del auto de prórroga de prisión, una nueva pieza, que suma la número 17, sobre la contratación de Villarejo por parte de Iberdrola.

    Una decisión que se produjo después de que MONCLOA.COM publicara los audios y la documentación que revelaban la relación entre la eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán y el excomisario.

    Los servicios que Iberdrola mandó a Villarejo incluyeron espionajes e infiltraciones para favorecer a los intereses de la empresa del Ibex-35 y su publicación precipitó el despido del jefe de seguridad de la compañía, Antonio Asenjo.

    AMENAZAS DESDE PRISIÓN

    Mientras el ‘caso Tándem’ continúa creciendo, Villarejo ha ido mandando amenazas desde prisión para forzar su puesta en libertad asegurando que posee muchísimo más material que el que obra en manos de la Audiencia Nacional, que, de momento, solo ha logrado desencriptar en torno a un 40 %.

    El excomisario, que se yergue como un cabeza de turco porque, según su versión, se ha limitado a realizar trabajos ordenados por los diferentes Gobiernos que se han ido sucediendo en el poder en España, asegura contar con información que podría hacer temblar los cimientos del Estado.

    Además, durante su última declaración en relación con el caso ‘Land’ que tuvo lugar este lunes en la Audiencia Nacional, Villarejo anunció que ha presentado una denuncia ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) contra los fiscales Miguel Serrano e Ignacio Stampa.