Los medios cubanos no se han hecho eco del discurso que el Rey Felipe VI pronunció en su visita a Cuba, donde también aprovechó para mantener un encuentro privado con el expresidente Raúl Castro, primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y General del Ejército.
El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación en funciones, Josep Borrell, ha dicho a los periodistas que Felipe VI recibió la invitación para este encuentro anoche, después de la ‘cena de devolución’ ofrecida por los Reyes de España al presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, y su esposa, Lis Cuesta. Después, también, de haber pronunciado su discurso en esa cena.
Borrell ha descrito la reunión como una muestra de «aprecio y reconocimiento de la importancia de la visita» que permitirá, precisamente, «redondear» la institucionalización de las relaciones al máximo nivel.
El ministro en funciones y el embajador español en Cuba, Juan Fernández Trigo, han acompañado al Rey en ese encuentro en el que, según Borrell, se hablaría de todo y sin cortapisas, pero teniendo en cuenta que es un diálogo privado. El ex jefe de Estado cubano y el español ya se conocen personalmente, por haber coincidido en tomas de posesión de presidentes iberoamericanos.
Precisamente fue Raúl Castro quien, como presidente, invitó a los Reyes de España a visitar Cuba, una invitación que transmitió el ministro de Relaciones Exteriores cubano, Bruno Rodríguez, cuando viajó a Madrid en abril de 2017. En Madrid, Rodríguez fue recibido tanto por Felipe VI como por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
El entonces ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, confió en que la visita pudiera producirse cuanto antes, y él mismo viajó a La Habana en septiembre de ese año para prepararla. En aquella ocasión, Dastis fue recibido por Castro, que aún era presidente. Un año antes, el presidente había recibido a los ministros en funciones José Manuel García-Margallo y Ana Pastor, ya con la vista puesta en una nueva fase de las relaciones bilaterales.
En diciembre de 2016 se derogaría la «posición común» de la UE hacia Cuba, que condicionaba cualquier avance en la relación a progresos en materia de derechos humanos, y se firmó un Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación.
La reunión de Felipe VI y Raul Castro se ha producido antes de que los Reyes se desplazasen al Museo de Bellas Artes, donde se expondrá durante unas semanas un Autorretrato de Goya que ha viajado desde el Museo del Prado -el primer préstamo de El Prado a Cuba– y, después, al Centro de Inmunología Molecular, centro de referencia de investigación contra el cáncer en Cuba.
SIN ALUSIONES AL DISCURSO DEL REY
Este jueves, en La Habana, los diarios oficiales ‘Granma’ y ‘Juventud Rebelde’ no hacen ninguna alusión en sus páginas web al discurso del Rey Felipe VI ante el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, en el que reivindicó la democracia y los derechos humanos. Tampoco a la respuesta del jefe de Estado cubano, defendiendo su camino hacia un «mayor bienestar» desde su propia «soberanía».
El viaje de los Reyes termina este jueves en la ciudad de Santiago, en el sur de la isla, con un homenaje al almirante Cervera y a los marinos españoles caídos en 1898 en la batalla naval de Santiago y, posteriormente, en las Lomas de San Juan, a los soldados que perdieron la vida en la batalla terrestre.