El líder de Podemos, Pablo Iglesias, es solvente. En un año, sus cuentas de ahorro personales (no las que comparte con su pareja, Irene Montero) apenas han sufrido cambios. Los 100.054,24 euros que presentó en el 2018 en el portal de transparencia de Podemos aún rondan esa cifra redonda. En la reciente declaración de bienes del Congreso, el líder de la formación morada ha asegurado tener 98,899,03 euros en sus cuentas corrientes. Un descenso leve, si se tiene en cuenta que Iglesias se ha desprendido de su Dacia Sandero Stepway (un coche de alrededor de 10.000 euros) para comprarse este verano un coche nuevo, del que no ha desvelado ni el importe ni la marca. Además, ha logrado reducir su hipoteca en 8.000 euros respecto a la anterior declaración de bienes presentada.
Aunque el patrimonio de Iglesias es notablemente inferior al de su pareja, la portavoz de Unidas Podemos, Irene Montero, sus cuentas de ahorro no han cambiado lo más mínimo en verano (incluso tras haberse comprado un coche nuevo y haberse librado de 7.930,81 euros de hipoteca). En la declaración de bienes que presentó el diputado en junio de 2019, reflejó unas actividades económicas (es decir, unos ingresos) que ascendían a 46.460,21 euros. Exactamente la misma cifra que ha presentado tras las elecciones del 10-N. Los datos se refieren al ejercicio de 2018 en ambos casos.
Sin embargo, los datos del portal de transparencia de Podemos son sensiblemente diferentes. Según los datos de la formación, Iglesias ingresó en el año anterior 48.748,64 euros que recibió como diputado y 41.211,41 euros que cobró por derechos de autor y por su trabajo como presentador de televisión, es decir, un total de 89.960,05 euros brutos ese año. En la declaración de bienes y rentas del Congreso no hay que incluir la retribución como diputado, aunque algunos sí lo hacen.
Luego está el patrimonio. Muy modesto si se compara con el de su pareja y futura ministra de Igualdad (previsiblemente). Iglesias dispone del chalet de Galapagar y de una vivienda en Ávila, que según refleja el portal de transparencia tiene un valor patrimonial de 13.814,12 euros. Montero, por su parte, dispone de tres viviendas (dos en Madrid y una en Ávila), un almacén, una finca urbana y una rústica (también en Ávila). Todas las propiedades al 50% (una con Iglesias y otras con su hermano).
Sobre el famoso chalet con piscina, el líder de Podemos tiene aún por pagar 467.657 euros. Un importe que no afronta solo, ya que la vivienda la ha adquirido junto a Montero. Lo llamativo es que desde que adquirieron el 9 de mayo de 2018 la hipoteca (que ascendía a 540.000 euros), la pareja ya se ha quitado desde entonces 72.343 euros del capital principal.
Es decir, que la pareja ha reducido lo equivalente a un ritmo de 4.300 euros al mes el saldo pendiente de la hipoteca, aunque puede ser que hayan realizado una amortización parcial de la misma. Esto datos indican que, al ritmo actual, tanto Irene Montero como Pablo Iglesias se librarían de la hipoteca en nueve años. La actual declaración de bienes señala que el saldo pendiente de la hipoteca es ahora de 467.000 euros, frente a los 475.000 de la declaración realizada en mayo, en la anterior legislatura. Los diputados pueden declarar estos datos referidos a 31 de diciembre del año anterior o al mes anterior a la presentación de la declaración. Por lo tanto, o ha reducido el capital pendiente en 8.000 euros en cuatro meses o la diferencia es desde diciembre de 2018 hasta octubre de 2019, que supone diez meses.
Luego está el coche nuevo. Iglesias se mueve en vehículo oficial; Con escoltas y todo lo necesario para una persona de su categoría. En 2017, el líder de la formación morada adquirió un Dacia Sandero Stepway, una marca rumana con precios muy asequibles, ya que el precio del vehículo, según el portal de transparencia, era de 10.000 euros. Sin embargo, este verano Iglesias ha decidido renovar su parque móvil, aunque no ha desvelado ni la marca ni el importe del nuevo coche. Además, el líder y futuro vicepresidente de España (siempre que den los números) tiene también una scooter cuyo valor ronda los 2.000 euros.
Aún así, los gastos y bienes de Iglesias se han moderado bastante estos últimos meses. El impacto mediático que tuvo la compra del chalet con piscina de Galapagar (que obligó al futuro vicepresidente del Gobierno a realizar una consulta con las bases de su partido sobre si debía seguir al frente de Podemos) ha convertido la discreción en la norma del líder de Unidas Podemos. Aún así, y pese a que Iglesias se ha mantenido en un segundo plano en algunas cuestiones, los casos de corrupción y su modo de vida no han dejado de salpicar a la formación morada.
Cuando se descubrió, según desveló La Otra Crónica, que Iglesias y Montero pagaban 100 euros la noche a una salus para que cuidara de sus hijos, no hizo falta otra consulta. Cuando se supo, como desveló Okdiario, que una de sus escoltas había denunciado a la pareja por utilizarla para realizar tareas domésticas, tampoco. Y cuando el exabogado de Podemos aseguró que había miembros del partido que cobraban sobresueldos, tampoco.
La tormenta mediática ha llegado a Podemos justo cuando pueden tocar con los dedos el Gobierno de España, el asalto al cielo que tanto ansiaban. Pero el acuerdo entre el PSOE y Unidas Podemos ha aligerado las cargas de la oposición contra Iglesias, ya que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y los suyos apenas han levantado la voz contra el líder de la formación morada.