La Real Academia Española (RAE) tiene muy claro que no dejará pasar ningún error gramatical, venga de quien venga. La última ha sido Irene Montero, la actual ministra de Igualdad, que cometió un error gramatical en su juramento ante el Rey que la RAE no ha tardado en cuestionar.
¿Qué es lo que dijo Irene Montero? ¿Y qué otros errores gramaticales han cometido otros políticos en los últimos años?
MONTERO Y SU CONSEJO DE MINISTRAS
La nueva ministra de Igualdad, Irene Montero, ha cometido un error a la hora de jurar su cargo ante el Rey Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela de Madrid. A la hora de terminar su juramento, Montero ha dicho «Consejo de Ministras» en vez de «Ministros». Esto ha sido duramente criticado en las redes sociales ya la mayoría de los usuarios de Twitter pensaban que no era lo correcto. Y tenían razón.
La RAE ha aclarado que no es gramaticalmente aceptable hablar de Consejo de Ministras si en el Gobierno hay ministros varones: «Si ese órgano de Gobierno estuviera constituido solo por mujeres, habría de denominarse Consejo de Ministras; pero esa fórmula no es gramaticalmente aceptable si en el Gobierno hay ministros varones», ha señalado la institución en un tuit.
Durante el acto de toma de posesión se escucharon tres opciones diferente: el Consejo de Ministros, la fórmula mixta y Consejo de Ministras, únicamente esta última por las dos ministras citadas de Unidas Podemos.
‘PORTAVOZA’, TAMBIÉN CRITICADA POR LA RAE
En 2018, Irene Montero usó otra palabra gramaticalmente incorrecta. A la hora de hablar de portavoz, la actual ministra escogió de forma intencionada la palabra «portavozas«, un término erróneo.
Tras escuchar esto, cientos de usuarios de Twitter se dirigieron hacia la RAE para preguntar por esta nueva expresión de Irene Montero, y la respuesta fue la siguiente: «El género gramatical se evidencia, en esos casos, a través de los determinantes y adjetivos: el portavoz español/la portavoz española«.
En este caso, el masculino incluye a los dos géneros, por lo que decir «la portavoza» suena redundante. Es un discurso reiterativo que no conduce a nada.
‘MIEMBROS Y MIEMBRAS’ DE BIBIANA AÍDO
En el año 2008, la entonces ministra de Igualdad, Bibiana Aído, usó uno término que, directamente, no existía en la RAE. La política dijo ‘miembros y miembras‘ para incluir a las mujeres en el discurso, aunque lo cierto es que cometió un gran fallo gramatical.
El masculino, en este caso, incluye al femenino, por lo que usar ‘miembros y miembras’ sería, de nuevo, redundante. En este caso, Bibiana Aído se disculpó un tiempo después y aseguró que había sido un lapsus. Aún así, otros políticos decidieron sacar el ‘miembras’ que varias ocasiones como, por ejemplo, en el caso de Pedro Sánchez.
‘JÓVENES Y JÓVENAS’, OTRO ERROR GRAMATICAL QUE NO PERDONA LA RAE
María Cecilia Velázquez, presidenta del Consejo de Educación de Santa Cruz, se dirigió así a los oyentes durante una entrevista radiofónica. «Así se dice o con una arroba como solemos decir nosotros para ponerle perspectiva de género», enfatizó, pero no llevaba la razón.
La RAE comentó que, de nuevo, era un error gramatical que no debería haberse cometido ya que la palabra ‘jóvenas’ no existe en el diccionario. Aquí, igualmente, el término ‘jóvenes’ engloba tanto a los chicos jóvenes como a las chicas jóvenes.
Como era de esperar, el ‘jóvenes y jóvenas‘ de María Cecilia Vázquez fue muy popular en las redes sociales y fue motivo de burla durante varios meses.
ALTAS CARGAS, DE FELIPE GONZÁLEZ
Un grupo de mujeres del Gobierno de Felipe González en los años ochenta se hacía llamar ‘altas cargas’ en vez de ‘altos cargos’. Este término no estaba demasiado bien visto por la RAE ya que, aunque era un grupo de mujeres, el término ‘altas cargas‘ no existía, por lo que se debía usar el masculino.
Aún así, este es el término que menos ha trascendido en la historia de los políticos y la Real Academia Española de la lengua. Es más, el ‘miembros y miembras‘ o el ‘jóvenes y jóvenas‘ han sido los más polémicos hasta el momento.
IRENE MONTERO ACUSA A LA RAE DE NO SER FEMINISTA
La segunda de Unidas Podemos ha señalado que la Academia de la lengua, la RAE, tiene que hacer mucho para defender la igualdad y es que, según expresó, la RAE «no es el mejor ejemplo a tomar en igualdad«.
Asimismo, también recordó que la Real Academia Española aún acepta acepciones como «fácil» para referirse a las mujeres que acceden a tener relaciones sexuales con relativa facilidad, una acepción que no le parece nada aceptable.
Por último, se defendió diciendo que «a veces desdoblando el lenguaje, aunque no suene muy correcto, se puede avanzar en la igualdad. Lo que no se nombra suele no existir».
