La portavoz de Ciudadanos en el Congreso, Inés Arrimadas, ha afirmado que tras el congreso extraordinario del partido comenzará una «nueva etapa» y que en la candidatura que presentará a las primarias, las mujeres tendrán un papel destacado.
Habrá «novedades» y será una Ejecutiva «donde las mujeres decidamos y mandemos mucho», pero sobre todo con «gente preparada y fuerte que piense en España», ha dicho en declaraciones a Telecinco recogidas por Europa Press.
Arrimadas ha explicado que Ciudadanos, «si así lo deciden los militantes», se someterá a «un cambio de etapa» tras asumir «responsabilidades por el mal resultado electoral» con la dimisión de varios dirigentes, incluido el presidente Albert Rivera.
Así, la diputada de la formación naranja ha insistido en «debatir de todo» y que los militantes elijan «entre varios modelos de partido». Arrimadas ha deseado que haya «dos candidaturas fuertes» en el proceso de primarias, en referencia a la suya propia y la que podría presentar el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea.
Según ha explicado, no tiene «ningún problema personal» con su excompañero de Ejecutiva, y le ha emplazado a que concurra a las primarias con una propuesta sobre la estrategia del partido y los futuros Estatutos. Respecto a esto último, ha reprochado a Igea que esté «prometiendo» un partido con ella como presidenta y con «un modelo de baronías» que, según ha dicho, no comparte.
Respecto a su propuesta para alcanzar acuerdos «transversales» entre fuerzas «constitucionalistas» de cara a las elecciones autonómicas en Galicia, País Vasco y Cataluña bajo la fórmula ‘Mejor Unidos’, la diputada ha subrayado que propone «algo más transversal» que una alianza con el PP y que su objetivo es «maximizar el voto constitucionalista«.
En este sentido, ha diferenciado su planteamiento de la coalición electoral ‘España Suma’ que el presidente de los ‘populares’, Pablo Casado, propuso para las anteriores elecciones generales. En este caso, Arrimadas apuesta por una alianza que incluya también a «socialistas desencantados» con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y miembros de la sociedad civil.
