Getafe se suma a Móstoles y Alcorcón: exige a Garrido las paradas a demanda en búhos

  • Getafe se ha reunido con la Consejería para pedir que les incluyan en el plan.
  • Sus quejas coinciden con la de otros municipios del sur, como son Móstoles y Alcorcón. 
  • De momento la Consejería no les ha respondido a sus nuevas demandas. 
  • Getafe ha sido la última ciudad en plantarle cara a Ángel Garrido. El consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid ha puesto en marcha un novedoso plan, actualmente en fase piloto, que permite a las mujeres y menores solicitar paradas a demanda en los autobuses interurbanos nocturnos. Un proyecto que pretende garantizar la seguridad de estos colectivos, pero que de momento se ha olvidado de varios pueblos importantes del sur de Madrid.

    Móstoles y Alcorcón se han quedado totalmente fuera de la iniciativa, mientras que Getafe está, pero a medias. La ciudad, capitaneada por la socialista Sara Hernández, tampoco cuenta con una línea propia que conecte la capital con los barrios más céntricos. Tan solo dos de ellos efectúan parada en tres puntos situados en carreteras o a las afueras del casco propiamente urbano.

    Las mujeres y menores que decidan desplazarse a Getafe a altas horas de la madrugada no pueden solicitar este servicio, a pesar de que hay varias líneas nocturnas que sí atraviesan puntos céntricos de la ciudad. Algunos de ellos, por ejemplo, son los aledaños a la Universidad Carlos III, que mueve a un gran número de jóvenes que se desplazan a Madrid con asiduidad para disfrutar de las alternativas de ocio que ofrece la capital. 

    GETAFE, INSISTENTE CON GARRIDO

    La exclusión de Getafe no ha sentado bien al gobierno local. Fuentes municipales aseguran que han pedido recientemente a Garrido que les incluyan lo antes posible en el plan. Según confirman desde el consistorio, ellos ya mostraron su interés en esta medida cuando se dio a conocer. Incluso el Ayuntamiento ya propuso una iniciativa similar para las fiestas locales de Getafe, por eso les ha sorprendido aún más quedar prácticamente fuera. 

    [td_block_11 custom_title=»» separator=»» post_ids=»73356″ limit=»1″ css=».vc_custom_1496993590403{border-top-width: 1px !important;border-right-width: 1px !important;border-bottom-width: 1px !important;border-left-width: 1px !important;padding-top: 5px !important;padding-right: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;padding-left: 5px !important;border-left-color: #000000 !important;border-left-style: solid !important;border-right-color: #000000 !important;border-right-style: solid !important;border-top-color: #000000 !important;border-top-style: solid !important;border-bottom-color: #000000 !important;border-bottom-style: solid !important;border-radius: 4px !important;}» tdc_css=»»]

    “Desconocemos por qué han tomado esa decisión”, añaden desde el equipo de Hernández, aunque insisten en que están muy interesados en ponerla “cuanto antes” en marcha y, sobre todo, esperan que no haya que esperar los tres meses que va a durar el plan piloto. Por el momento no hay organizados más encuentros con la consejería de Transporte, aunque no descartan que se puedan producir alguno más si no hay respuesta por parte de la administración de Garrido.

    La ciudad getafense es una de las más pobladas –la quinta después de Madrid– y mejor conectadas con la capital. Posee cuatro líneas principales de autobuses interurbanos nocturnos y justo las dos más importantes, la N-801 y N-805, son las que se han quedado fuera. Estas dos conexiones atraviesan toda la ciudad, mientras que el resto solo incluyen tres paradas en el término municipal de Getafe y coinciden con zonas más alejadas del centro, como pueden ser el Hospital o el Sector III. No obstante, la situación es peor en otras ciudades, como es el caso de la vecinas Móstoles y Alcorcón. 

    MÓSTOLES Y ALCORCÓN, OLVIDADAS

    Móstoles y Alcorcón se han quedado absolutamente fuera de este proyecto piloto. Los dos municipios no disponen actualmente de ninguna conexión nocturna que permita las paradas a demanda para mujeres y menores. Una decisión de la consejería que dirige Garrido que ya han confrontando desde ambos consistorios locales

    Los gobiernos de estos municipios se han puesto manos a la obra y han mandado una carta al consejero de Transportes solicitándoles que reconsidere la implantación de esta medida cuanto antes. Alejandro Martín, concejal de Seguridad, Convivencia, Cultura y Transición Ecológica de Móstoles (PSOE), admite que “no entiende cómo una experiencia piloto de gran calado, como es esta, se olvide de la ciudad”, que precisamente es la segunda más poblada de Madrid, tan solo superada por la capital. 

    Martín ha insistido en que no van a desistir en su empeño de que el plan se implante ya y quiere pensar que se ha tratado de un descuido y no tiene otro trasfondo. “No nos gustaría pensar que hacen los proyectos en función del color”, porque a su juicio “lo importante aquí es la seguridad de las mujeres y los menores, ya que hay mucho movimiento Madrid-Móstoles”. Otros municipios con menos habitantes como es el caso de Valdemoro, gobernado por Ciudadanos, sí cuentan con esta línea. 

    La otra parte del gobierno mostoleño, representada por Podemos, comparte la misma opinión de Martín. La portavoz del partido, Mónica Monterreal, reconoce que les sorprendió mucho quedarse fuera del plan e insiste en que están muy interesados en participar en el mismo, aunque no fueran informados desde el principio. Ahora van a intentar que el municipio logre incorporarse al proyecto antes de que acabe la fase de prueba y esperan reunirse pronto con el consejero de Transportes, con el que tienen que tratar varios temas claves que afectan al transporte de la ciudad.

    [td_block_11 custom_title=»» separator=»» post_ids=»70311″ limit=»1″ css=».vc_custom_1496993590403{border-top-width: 1px !important;border-right-width: 1px !important;border-bottom-width: 1px !important;border-left-width: 1px !important;padding-top: 5px !important;padding-right: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;padding-left: 5px !important;border-left-color: #000000 !important;border-left-style: solid !important;border-right-color: #000000 !important;border-right-style: solid !important;border-top-color: #000000 !important;border-top-style: solid !important;border-bottom-color: #000000 !important;border-bottom-style: solid !important;border-radius: 4px !important;}» tdc_css=»»]

    Alcorcón, por su parte, vive una situación análoga. El Ayuntamiento también ha pedido nuevamente a Garrido que los incluyan en el plan lo antes posible. Daniel Rubio, primer teniente de Alcalde y responsable de política institucional del PSOE de Alcorcón, argumenta que su municipio ya tiene una experiencia previa en la implantación de medidas como esta. Durante las fiestas patronales se puso en marcha y “funcionó muy bien”. De hecho, el propio Garrido se desplazó hasta Alcorcón para valorar su acogida y Rubio mantiene que tuvieron “muy buenas palabras” y que hablaron de estrechar la sintonía entre ambas administraciones. 

    Teniendo en cuenta estos antecedentes, Rubio no entiende cómo se han quedado fuera del proyecto. Al igual que Móstoles, prefiere no pensar que las “consejerías actúan de forma arbitraria”, sino que piensan en el bienestar común de todos los ciudadanos. De momento, Garrido, al igual que otros consejeros, no han contestado a sus últimas peticiones y tampoco les ha concedido varias citas que Rubio asegura tienen solicitadas desde hace tiempo.

    LA RESPUESTA DE LA CONSEJERÍA

    Desde la Consejería quitan hierro al asunto. Según defienden, la decisión de dejar fuera a estos municipios no ha sido intencionada. Para determinar qué líneas formarían parte del proyecto piloto siguieron algunos criterios “de los técnicos del Consorcio de Transportes”, que dirige Garrido. Uno de ellos era que los municipios hubieran mostrado su interés por el proyecto con anterioridad. Algo que, desde Getafe, Móstoles y Alcorcón aseguran que hicieron. 

    Ahora toca esperar a que la Consejería se posicione nuevamente sobre los últimos requerimientos de estos consistorios. Aunque por el momento han avanzado su intención de seguir con las seis líneas vigentes y esperar a que acaben los tres meses de prueba antes de ampliar a otros trayectos. Todavía es pronto para sacar conclusiones, pero la medida ya ha acumulado 41 peticiones de paradas a demanda tan solo en su primera semana de funcionamiento.