El dilema ‘olímpico’ de Sánchez: o Madrid 2032 o Barcelona 2030

  • Madrid estaría pensando en presentarse a los JJOO 2032.
  • Barcelona suena como una de las mejores candidatas para los Juegos Olímpicos de Invierno en 2030.
  • El Gobierno de Pedro Sánchez tendrá que decidir a qué ciudad apoya, ya que las dos no podrían ganar.
  • El Gobierno de Pedro Sánchez se encuentra en medio de la batalla por los Juegos Olímpicos. El Ayuntamiento de Madrid, que dirige José Luis Martínez-Almeida, estaría considerando la posibilidad de presentar la candidatura de la capital a los JJOO de 2032, mientras que Barcelona no descarta intentar hacerse con los Juegos Olímpicos de Invierno para el año 2030. Dos posibles candidaturas que es difícil que ganen a la vez y que hará al Ejecutivo tener que decidir: o Madrid 2032 o Barcelona 2030.

    Este dilema enfrentaría a Sánchez con dos frentes muy polarizados. Por un lado, se encuentra el bando constitucionalista madrileño, que lleva años luchando por conseguir esta cita, mientras que del otro lado topa con el ala independentista catalana, que no renunciará tan fácilmente a un evento de esta magnitud que pondría a Barcelona en el centro del mapa, con todo lo que eso supondría.

    Las fuerzas independentistas no dejarían pasar una oportunidad como esta para la ciudad condal, ya que beneficiaría notablemente a la economía catalana y podrían utilizarlo para relanzar internacionalmente la cuestión secesionista. Esta postura salpicaría de lleno a Sánchez, que actualmente está manteniendo un buen decoro con una parte del independentismo, como es ERC. El partido de Gabriel Rufián le ha dado su apoyo para la investidura y podrían incluir entre sus exigencias para el Gobierno el respaldo de este a Barcelona para los JJOO de Invierno 2030.

    Si esta situación se produjera, el Ayuntamiento de Madrid tampoco se quedaría con las manos cruzadas e intentaría luchar para que la capital de España finalmente consiguiera unas Olimpiadas. Madrid ha intentado en cuatro ocasiones hacerse con la organización del evento y ninguna ha tenido éxito. La primera fue en 1972 y no volvió a intentarlo hasta años más tarde, donde perdió tres veces consecutivas la de 2012, 2016 y 2020. La ciudad madrileña nunca ha sido la anfitriona de unos JJOO, mientras que Barcelona ya tuvo los suyos en 1992. Madrid, si finalmente decide postularse como candidata, no dejará que Barcelona vuelva a arrebatarle su sueño olímpico. Y Sánchez tendrá que elegir, porque las dos no es posible.

    JUEGOS OLÍMPICOS MADRID 2032: EN EL AIRE

    Expertos en la organización de estos eventos afirman a MONCLOA.COM que Madrid y Barcelona tendrán que coordinarse porque “no podrán ganar la candidatura a los Juegos Olímpicos los dos”. Es muy complicado que un mismo país, con tan poco margen de tiempo, sea el anfitrión de este evento. Un hecho que obligará al Gobierno a inclinarse a un lado o a otro.

    De momento, Barcelona parece una candidatura más consolidada que la de Madrid. El consistorio de la capital todavía no ha oficializado su intención de luchar por los Juegos Olímpicos de 2032. Sin embargo, el alcalde madrileño ya ha puesto la primera piedra para emprender este camino. Martínez-Almeida ha expresado recientemente su deseo de que Madrid sea ciudad olímpica en 2032: “No renuncio al sueño”, afirmó. 

    Martínez-Almeida considera que a Madrid se le deben “unos Juegos Olímpicos” porque actualmente es “la única gran capital” del mundo que no los ha organizado. El alcalde madrileño espera que esto “tarde o temprano” se solucione y Madrid 2032 podría ser un buen año para ello. No obstante, el popular reconoce que no se están dando “muchos pasos al respecto” y que antes de lanzarse como candidato deberían “tratar de ver cuál es el consenso social, económico, político y cultural” que obtiene esta propuesta. 

    El apoyo de los empresarios, por ejemplo, sería importante y actualmente no estarían cerrados a ello. El Comité Olímpico Internacional tampoco vería con malos ojos a Madrid como sede olímpica, aunque fuentes cercanas aseguran que hay otras posibilidades encima de la mesa. Quien de momento sí que está poniendo trabas a esta candidatura es la otra parte del Gobierno local, Ciudadanos.

    Tanto la concejala delegada de Deportes, Sofía Miranda, como el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, –ambos de la formación naranja– han asegurado que la ciudad tiene ahora “otras prioridades más urgentes” que resolver antes de lanzarse a la convocatoria de unos JJOO. Aunque no niegan que conseguir este evento sería “un sueño para cualquier madrileño”. De momento, la vicealcaldesa de la capital, Begoña Villacís, ha preferido guardar silencio sobre su posicionamiento en este tema. 

    PIRINEUS-BARCELONA 2030, EN MARCHA

    A diferencia de Madrid, que está en el aire, Barcelona tiene ya más avanzada su candidatura hacia los Juegos Olímpicos de Invierno, Pirineus-Barcelona 2030. La sociedad civil ya ha expresado su interés en que la ciudad condal se postule para esta cita. El pasado septiembre, durante un acto organizado por Sport Cultura Barcelona, los empresarios hablaron de los valores que impulsa este proyecto deportivo. 

    Al evento no faltaron, además, miembros clave para que la candidatura avance como el vicepresidente del Comité Olímpico Internacional, Juan Antonio Samaranch, y el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco. El actual vicepresidente del COI es a su vez hijo de Juan Antonio Samaranch, quien llegó a ser presidente del COI y que durante su mandato consiguió para su ciudad los JJOO Barcelona 1992, los primeros para España.

    Desde su dilata experiencia en este sector, Samaranch –hijo– no dudó en resaltar el potencial que tiene Barcelona para alzarse como la ganadora para 2030 e insistió en que “existen posibilidades reales de conseguir la organización de estos Juegos porque el proyecto lo tiene todo”. Eso sí, destacó un aspecto que podría tumbar esta celebración, la inestabilidad política.

    Samaranch advirtió de que es fundamental que haya “unidad política”, es decir, que “los políticos deben estar de acuerdo en querer estos Juegos”. Ahora la pelota está en el tejado de Sánchez. Una decisión final que podría garantizar ese escenario político sólido y estable para Cataluña o, por el contrario, inclinarse hacia Madrid, con el objetivo de no ahondar el descontento con el gobierno de la capital de España.