La portavoz de Ciudadanos en el Congreso y candidata a liderar el partido, Inés Arrimadas, ha advertido a su contrincante en las primarias y vicepresidente de Castilla y León, Francisco Igea, de que con «ataques» y con «pesimismo» no se genera ilusión, mientras que Igea ha insistido en que el partido debe asumir los errores que ha cometido y abandonar el «frentismo».
Durante el debate que han mantenido este miércoles por la noche en la sede central de Cs a tres días de que se celebren las primarias, Igea ha cuestionado el modelo de organización del partido y también algunas de las decisiones estratégicas que tomó la dirección encabezada por Albert Rivera.
Arrimadas ha admitido que en Ciudadanos se han equivocado «en muchas cosas», pero también ha afeado a Igea sus críticas en los últimos meses: «Decir en los medios que este partido está muerto, que es leninista, que es cesarista, que estamos en parada cardiaca, que tiene meningitis o que es totalitario no es autocrítica, es autodestrucción».
Por ello, le ha propuesto que «gane quien gane» las primarias, el otro le dé su apoyo, «no cuestione el resultado de las votaciones» y no diga en los medios que el partido «no es democrático».
IGEA PROPONE PACTAR «A IZQUIERDA Y A DERECHA»
Igea, por su parte, ha puesto en duda que Cs hiciera todo lo posible para evitar que el líder del PSOE, Pedro Sánchez, pactara con Podemos y con partidos nacionalistas tras las elecciones generales de noviembre y ha cuestionado también la coalición electoral con el PP en el País Vasco y las que Arrimadas planteó en Galicia y Cataluña.
«Las líneas rojas no pueden ser las personas, los partidos o las siglas», ha subrayado el dirigente castellano y leonés, que quiere un Ciudadanos que pueda «tender la mano a izquierda y a derecha» y base sus pactos en las políticas y los programas.
En este sentido, ha rechazado que Cs entre en una «trinchera» política y favorezca la «polarización». A su juicio, su papel es combatir los «populismos de derecha y de izquierda» e intentar que las mayorías de gobierno no se sustenten en estas fuerzas.
IGEA CRITICA LA COALICIÓN CON EL PP
En cuanto a las coaliciones propuestas en Euskadi, Galicia y Cataluña, Igea ha lamentado que el PP y Cs hayan «hablado de puestos y cargos» más que de programas y ha avisado del riesgo de «desdibujar» la marca del partido.
Arrimadas ha afirmado que ella siempre toma sus decisiones priorizando «el interés general de los españoles» por encima del interés de Ciudadanos porque hay que «ser generoso para frenar al nacionalismo y al populismo». En cualquier caso, ha asegurado que al sumar con el PP, la formación naranja no pierde su «identidad propia».
Así, la portavoz parlamentaria ha indicado que Cs es el único partido «de centro, liberal, moderno, de progreso y reformista» que hay en España y «va a seguir siendo así».
ARRIMADAS: NO HAY QUE «BLANQUEAR LOS ERRORES DEL PSOE»
En relación con los pactos, ha recordado la «solución de desbloqueo» que Rivera ofreció a Sánchez el pasado septiembre y la «vía 221» que ella misma le planteó tras las elecciones de noviembre para un pacto entre el PP, el PSOE y Cs.
El PSOE «despreció» esas ofertas, ha añadido, lamentando igualmente que los socialistas prefirieran gobernar en Navarra con el apoyo de los nacionalistas. Por todo ello, ha pedido a Igea que no le haga «un favor a Sánchez» y no caiga en «blanquear los errores del PSOE».
Arrimadas ha insistido en la importancia de explicar «las cosas buenas que está haciendo Ciudadanos» allí donde gobierna y ha dicho que las elecciones de noviembre fueron simplemente «un resbalón» y ahora toca «coger fuerzas» y mirar hacia el futuro.
«Tenemos dos maneras de enfocar este congreso» del 14 y el 15 de marzo, «desde el pesimismo y los ataques» o «desde el optimismo y el aprendizaje de los errores», ha manifestado, prometiendo avanzar hacia una «nueva etapa con cambios y mejoras» y un partido «muy vivo, fuerte y unido» en el que puedan volver a confiar millones de españoles.
DISCREPANCIAS EN EL MODELO DE PARTIDO
Los dos candidatos han dejado claras sus discrepancias en relación con el modelo de organización interna que defiende cada uno. «Mi partido no es de baronías porque creo más en la militancia y en los ciudadanos que en los territorios», ha dicho la diputada.
En cambio, el vicepresidente autonómico ha insistido en que los militantes quieren «participar y decidir» y deberían poder elegir a los cargos autonómicos, lo cual cree que ayudaría a tener un partido mejor «implantado en todo el territorio».
No se trata de implantar un sistema de «baronías» territoriales, sino de que «la gente no le deba la vida a un señor que les nombra desde arriba», ha dicho en alusión al presidente y a la Ejecutiva nacional.
Arrimadas sigue rechazando esta propuesta porque, en su opinión, «tener 17 PSC no va a dar más voz a la militancia» y simplemente haría que Ciudadanos perdiera «una de sus grandes señas de identidad, que es tener el mismo discurso» en toda España.
«Yo no quiero encajonar a los militantes en una comunidad autónoma, quiero fomentar la participación sectorial», ha recalcado tras apuntar que la enmienda a la totalidad de los Estatutos presentada por el sector crítico encabezado por Igea no aborda esta cuestión.
ARRIMADAS, POR UN MODELO «MÁS PARTICIPATIVO»
En este contexto, la diputada ha afirmado que su modelo prevé «más mecanismos de participación y escucha» de los afiliados que el que propone su contrincante. Igea, por su lado, ha hecho hincapié en la necesidad de reformar órganos como el Consejo General, «diseñado para conseguir mayorías del 95%», y suavizar el régimen disciplinario.
Arrimadas también ha indicado que si ella se convierte en la próxima presidenta de Ciudadanos, habrá cambios significativos en la organización, con una mayor «descentralización» de las responsabilidades y más rendición de cuentas por parte de los cargos, y en la comunicación.
Sin embargo, Igea considera que se han mantenido «la misma organización, estrategia, comunicación» y «prácticamente los mismos equipos» que había con Rivera, transmitiendo el mensaje de que la dirección de Ciudadanos no se equivocó «en nada».
La diputada ha argumentado que los errores ya se pagaron con la dimisión del presidente y sus tres principales colaboradores en la Ejecutiva y ha afirmado que en su candidatura ha incluido a «un equipo crítico».
IGEA QUIERE QUE SE PUEDA CRITICAR AL LÍDER
El vicepresidente del Gobierno de Castilla y León no está de acuerdo en esto, pues lo que ve en la candidatura de Arrimadas es «continuidad». Con tono irónico, le ha dicho: «Es evidente que te has rodeado de un equipo crítico», porque no está «ninguna de las siete personas que en la Ejecutiva dijo que era un error» negarse a pactar con Sánchez.
«Yo nunca dejaré de contar con nadie porque me haya llevado la contraria», ha afirmado, defendiendo que un partido liberal «tiene que ser capaz de aceptar la crítica y creer en la libertad expresión». Por eso, «si fuese presidente» de Cs, «quiero que me digas sin parar cuando me equivoque», ha agregado.
Igea ha cerrado el debate dirigiéndose a todos los afiliados y, en particular, a los que están «cansados de ser atrezzo, de inflar globos» y de sentir que no se cuenta con ellos, para animarles a votar en las primarias y así «cambiar las cosas».
Pero Arrimadas ha cuestionado que el modelo de partido que plantea su rival sea el que quiere la mayoría de los militantes. Según ha recordado, la plataforma crítica Cs Eres Tú solo ha conseguido un 6% de los compromisarios de cara a la Asamblea General, aunque Igea ha señalado que ese porcentaje tan bajo se explica más por el sistema de elección que por una falta de apoyo entre los afiliados.