El comisario jefe de los Mossos d’Esquadra, Eduard Sallent, ha explicado este viernes que la policía catalana trabaja con un posible cierre global de Cataluña en el marco de los diferentes escenarios que plantean frente a la pandemia de coronavirus.
En declaraciones a ‘El Matí de Catalunya Ràdio’ recogidas por Europa Press, Sallent ha asegurado que el posible cierre de la comunicado «no sería difícil» y que existen los recursos para llevarlo a cabo.
De los 17.000 efectivos que integran los Mossos, Sallent ha explicado que tienen un caso de Covid-19 registrado y otros 30 en aislamiento por contacto, y ha añadido que necesitan tener «la musculatura suficiente dentro del cuerpo» para hacer cumplimiento de las directrices del plan Procicat.
Ha argumentado que la pandemia en Cataluña se está gestionando para que «la emergencia sanitaria se desarrolle a través de un contagio progresivo», y no se produzca un colapso ni a nivel sanitario ni policial.
Sallent ha detallado que la policía catalana no se ha coordinado con el Ejercito ni lo ha contactado porque «el sistema de salud pública garantiza la coordinación del dispositivo» en Cataluña.
CONFINAMIENTO EN LA CONCA D’ÒDENA
Sallent ha explicado el dispositivo que han impulsado para confinar a las 70.000 personas del área de la Conca d’Òdena (Barcelona), previsto, en principio, para los próximos 14 días, pero ha recordado que la duración la decidirá el comité técnico del Procicat.
Se han modificado las salidas de autopistas y autovías para que sólo haya dos entradas a la zona: una para vehículos de mercancías para que los ciudadanos tengan alimento, medicamentos y otros productos de primera necesidad, y otro para vehículos de emergencia y la gestión sanitaria.
Ha recordado que no se dejará salir a las personas de la Conca d’Òdena, ha advertido de que aquellas que quieran entrar no podrán salir y ha añadido que, tanto Salud como los Mossos, impondrán sanciones si se desobedecen las indicaciones.