El objetivo del confinamiento se notará esta semana en la Comunidad de Madrid; al menos es la esperanza que tiene el Consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero. La ventaja que tiene el hacer las cosas tarde ante una pandemia es que la curva de infectados baja antes. Eso sí, después de haber tenido unas consecuencias nefastas para la economía y la sociedad. Desde la Comunidad de Madrid, al igual que en España, esperan que la curva de infectados empiece a descender esta semana. Pero los funcionarios de la administración autonómica son más optimistas que los que asesoran al Gobierno central. Unos cálculos que no convencen del todo, si se tienen en cuenta los pronósticos que han elaborado los expertos.
En cualquier caso, las diferencias entre los gobiernos solo es cuestión de días. Es decir, que mientras los mensajes del presidente del Gobierno apuntan a que esta semana será la peor, pero la última, de esta evolución de la pandemia, los de la Comunidad de Madrid dan un paso más optimista, pero similar. Sea el miércoles, como prevén desde la Comunidad, o a finales de semana, como auguran los asesores del Gobierno, todo indica a que la cresta de la ola será esta última semana de marzo, por lo que abril será un mes plagado de mejores noticias.
Otro dato optimista que ayuda a pensar que esta semana empezará el descenso de la odiada y famosa curva es nuestro reflejo en Italia. Este país, que ha sido el más afectado de momento por la crisis del coronavirus en Europa, parece que ve una tenue luz tras este oscuro sendero. El número de infectados diarios se ha reducido. Ha bajado la frecuencia, lo que indica que está a poco de iniciar el esperado y ansiado descenso. Ya se notan las consecuencias del confinamiento y eso se ve en las gráficas. Y si Italia baja, nosotros también. Es cuestión de tiempo.
«Yo calculo que a partir del miércoles empecemos a notar ese efecto», ha declarado el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid. No lo calcula él, sino sus asesores y expertos que prevén que ya es hora de que se noten casi dos semanas de cuarentena. Y Sánchez avisó de que esta semana sería muy dura, pero esta semana. Después, se espera que la cosa empiece a mejorar día tras día. Y a un ritmo casi tan rápido como el que hemos tenido hasta ahora repleto de malas noticias.
«Yo calculo que a partir del miércoles empecemos a notar ese efecto»
El primer aviso de que llegamos al final de ese vertiginoso ascenso de infectados es que se reducirá el ritmo de infectados diarios hasta llegar a cero, el punto en el que está ahora mismo China. En España la cosa cambiará porque no se han hecho demasiados tests, sino que más bien pocos. Ahora, si el Gobierno empieza a hacer las cosas bien, habrá un pico de infectados que alterará la gráfica, siempre que empiecen a realizar las pruebas (esas que han comprado tarde) a todos. Pero aún así, esta semana se espera que sea la crítica. La peor y la mejor al mismo tiempo. Mejor porque indicará que a partir de ese momento, abril será la remontada.
Abril estará marcado por el confinamiento, peor ya se podrá especular con una fecha para que el país empiece a reactivarse. El Gobierno, dentro de su prudencia y guardándose un as en la manga (el de la prórroga), ha ampliado el estado de alarma hasta el día 15. Pero sea el 20 o el 25 de abril, este mes estará marcado por noticias más positivas, que provendrán tanto de Italia como de nuestro propio país.
En un clima áspero, tenso, con los ciudadanos en plena cuarentena, es positivo que los políticos, tanto del Gobierno como de la Comunidad de Madrid, se lancen a augurar días mejores. Queda poco para que se empiece a ver la luz en España. Y se espera que las medidas del confinamiento se empiecen a notar con tanta contundencia como se notó la llegada del virus.
MAYO, COMO TARDE
El peor de los escenarios que baraja el Gobierno es levantar la cuarentena en mayo. Pero los datos parecen descartar esta situación. Ahora, los mensajes del Gobierno se centran más, los datos parecen apoyar la idea de que a finales de abril, como tarde, se levantará esta cuarentena que tiene a todos los españoles en vilo.
No será mayo. Ahora, la fecha crítica es finales de abril. «Mínimo tres semanas», relatan fuentes cercanas al Gobierno. Ese mínimo es prudente, pero razonable. Si se quiere ser aún más cauto, se puede sumar una más. Por lo que para el 20 de abril, todos los españoles podrían estar en la calle de nuevo.
