Como Irene Montero no puede con el coronavirus, vuelve con el machismo

Mientras el resto del mundo está preocupado por una pandemia que ha arrasado en todo el mundo, la ministra de Igualdad, Irene Montero, parece haber encontrado otra preocupación adyacente. En España ya se han superado los 11.000 fallecidos a causa del coronavirus enmarcados en los más de 120.000 infectados confirmados que hay en el país. Sin embargo, Montero está centrada en una consigna propia de su partido: la lucha contra la violencia de género. No es que haya recuperado la idea de ese cartel del 8-M que decía que “el machismo mata más que el coronavirus”, pero sí ha aprovechado la coyuntura para recuperar ese nicho que llevó a la formación a cambiar de género el nombre del partido.

Una mujer de 78 años ha muerto a causa de la violencia de género este mes. Ya son 18 las víctimas que deja 2020 y 1.051 desde 2003. Unos datos dramáticos que Irene Montero ha recordado en sus redes sociales y en cada entrevista que le han hecho desde que ha retomado su actividad política desde una de las habitaciones del chalet de Galapagar. Sin embargo, Montero ha dado un paso más lejos y ha asociado el confinamiento al aumento del riesgo de la violencia de género. “Mis condolencias para la familia y amistades de la mujer asesinada. Nos queremos vivas”, ha recordado Montero.

El Ministerio de Igualdad, del que Montero es titular, también se ha lanzado a recordar en plena pandemia el riesgo que sufren todas estas mujeres a causa del confinamiento. “La ministra de Igualdad, Irene Montero, explicaba anoche en Hora 25 que la seguridad de las víctimas de violencia de género y de los suyos es lo primero”, recordaba la página oficial del ministerio de Montero. “Los datos confirman que las llamadas y las consultas al servicio de atención a las víctimas de violencia de género están aumentando durante el confinamiento”, comentaban desde el ministerio el pasado 1 de abril.

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Igualdad ha recuperado estos últimos días su preocupación por la violencia de género y ahora no han dejado de asociar el confinamiento con el aumento de esta lacra de la sociedad. “Se ha reforzado la atención a las víctimas, tanto de violencia de género como de explotación sexual, y se han tomado medidas especiales para poder acoger a todas las mujeres en situaciones de riesgo”.

Mientras el resto de ministerios están centrados en la crisis económica que sucederá a la sanitaria y en controlar una pandemia que ha dejado más de 11.000 fallecidos en el país, el de Montero ha vuelto a la carga con el género. Desde que la ministra superara el coronavirus, prácticamente todas sus declaraciones se han centrado en el supuesto que relaciona la cuarentena con la violencia de género y ha dejado en un segundo plano las consecuencias de la pandemia. Eso sí, de vez en cuando ha lanzado un mensaje residual que recordaba que Podemos se ha esforzado por imponer un escudo social para cubrir a los más vulnerable de la crisis.

EL MACHISMO MATA MÁS QUE EL CORONAVIRUS

Quién no recuerda a esa manifestante del día de la mujer con un cartel que decía que el machismo mataba más que el coronavirus. El error del Gobierno fue el permitir que se celebraran todo tipo de actos multitudinarios hasta pasado el 8 de marzo. La oposición y los más críticos con el presidente Pedro Sánchez aseguran que lo hizo para que su Gobierno se hiciera la foto como defensores de los derechos de la mujer. Los menos críticos creen que simplemente el Gobierno, al igual que ha pasado en todos los países del mundo, pecó de poco previsor y se encontró con una crisis de unas dimensiones que no se esperaba.

Aún así, el hecho es que se reaccionó más de un mes después de las primeras advertencias de que el coronavirus era un potencial riesgo. Policía y miembros del Gobierno lanzaron documentos que así lo acreditaban. Y cuando el virus ya estaba en España, se mantuvieron todo tipo de eventos, así como un corredor aéreo entre el norte de Italia, ya muy afectado por la pandemia, y España. Y un mes después ya hay más de 120.000 infectados.