González Laya dice que sería «casi milagroso» no equivocarse

La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha afirmado este lunes que «equivocarse es humano» y que «sería imposible que los humanos no se equivocasen, aún más con una crisis sin precedentes» como es la de la epidemia del coronavirus.

«Con gran humildad, sería casi milagrosos que alguien no se equivocase en algo cuando tiene que gestionar una crisis como ningún otro gobierno ha tenido que gestionar», ha dicho en una entrevista en Antena 3, recogida por Europa Press.

Con todo, ha incidido en que «la actuación del Gobierno de España «siempre ha estado guiada» por las recomendaciones de las autoridades sanitarias internacionales, europeas y españolas».

Preguntada entonces por la recomendación de la OMS, que lleva semanas pidiendo que se hagan tests para conocer la magnitud del problema, ha señalado que en España se producen 245.000 tests PCR a la semana, por parte de cuatro empresas, y que esa capacidad de producción se verá multiplicada por tres con la incorporación de otras cuatro.

A esos tests, ha dicho, se añadirán los tests rápidos, que tienen un «nivel de fiabilidad interior» pero son «útiles cuando tienes que hacer muchos de manera muy rápida». «Para la fase de desescalada es muy importante saber quiénes están contagiados, para poder ir abriendo gradualmente el confinamiento de los ciudadanos», ha resumido.

La desescalada, ha dicho, tendrá «distintos ingredientes»: Test a los ciudadanos, con el foco en los asintomáticos que pueden ser portadores y transmisores del virus; refuerzo de la capacidad sanitaria y medidas destinadas a los ciudadanos, que serán medidas de distancia social o de salubridad, como las mascarillas.

La ministra ha señalado que en otras zonas del mundo, fundamentalmente en Asia, donde han pasado otras epidemias, ya están acostumbrados a llevarlas «porque ayudan a protegerse uno mismo y a los demás».

PRODUCCIÓN DE MASCARILLAS

En cuanto al abastecimiento de mascarillas, González Laya ha señalado que hay numerosas empresas que han reconvertido su producción textil para producirlas, las «más sencillas», que son las que «probablemente» todo el mundo tendrá que aprender a usar como medida profiláctica.

Así, ha asegurado que «evidentemente, cuando la ciudadanía comience a poder ir saliendo de su confinamiento estas mascarillas estarán disponibles tanto desde lo público como desde el sector privado».

Según ha dicho, ahora «dado que los ciudadanos están en sus casas», se está privilegiando que las utilicen los sanitarios, los efectivos militares y de seguridad y los trabajadores que las necesiten. En todo caso, ha señalado que se va a completar producción nacional con importaciones.