Los datos y la realidad parece que esta vez van de la mano. La pandemia pierde terreno, y eso se nota en las medidas que se toman a nivel político. La Comunidad de Madrid cerrará el Palacio de Hielo este miércoles. El que fuera uno de los centros improvisados para albergar los cuerpos de aquellos que fallecieron a causa del coronavirus ya no es necesario y la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha decidido dejar de utilizarlo para ese fin. Se clausurará este miércoles y al cierre acudirá también la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el jefe de la UME, el teniente general Luis Manuel Martínez.
Son buenas noticias dentro de un panorama dramático que ha dejado el mes de marzo y la primera quincena de abril, pero ya parece que el país empieza a ver la luz. El cierre del Palacio de Hielo, un centro ubicado en la capital donde se acumularon los cuerpos de cientos de fallecidos, puesto que no había funerarias suficientes para poder ofrecer un servicio adecuado, es un indicativo de que la Comunidad de Madrid ha mejorado sus datos frente a la pandemia.
Al acto de cierre acudirá tanto la presidenta de la Comunidad de Madrid como la titular de Defensa y el jefe de la Unidad Militar de Emergencias. Que esto sea así no es casual, ya que la cooperación del ministerio con la Comunidad ha sido ejemplar. Y el trato y el trabajo que la UME ha dado desde el minuto uno a los fallecidos, inmejorable, según detallan desde la Comunidad de Madrid. «Los velamos como si fueran de los nuestros», aseguraban desde la Unidad. Unas palabras que han valido y han generado el máximo respeto por parte de la presidenta.
La clave en este asunto ha sido la cooperación entre la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Defensa. Mientras que Ayuso ha tenido problemas y altercados, unos más públicos que otros, con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y con su vicepresidente Pablo Iglesias por diversos asuntos, el trato con Robles ha estado más encarrilado. Esta es la razón por la que Ayuso haya llamado directamente a la titular de Defensa para pedirla que les acompañara en el acto de cierre del Palacio de Hielo.
Mientras que Sánchez improvisaba planes de entrega de mascarillas en la Comunidad de Madrid tras la reapertura al trabajo, Robles colaboraba estrechamente con Ayuso para solucionar todos los problemas que surgieran. La sintonía entre Robles y la presidenta de la Comunidad y los exabruptos entre Ayuso y Sánchez dejan un panorama claro: que el Gobierno se mueve en varias direcciones y con una descoordinación que ha quedado manifestada en hechos como la entrega de mascarillas en Madrid.
Con el cierre del Palacio, sería la segunda morgue provisional clausurada en la Comunidad de Madrid, después de que el Gobierno regional cerrase el martes pasado día 14 la del Palacio de Hielo de Majadahonda.
Hasta el pasado martes, los tres recintos habilitados habían recibido en total 1.785 fallecidos. Ahora, según los datos de este domingo, se ha registrado un repunte de infectados, pero un descenso del número de fallecidos. Habrá que esperar para ver cómo afectan y cómo evolucionan los casos en la capital, pero todo parece indicar que se mejora de forma sustancial con el paso del tiempo.
