La empresaria lleva días subiendo a sus redes pequeños vídeos en los que analiza y opina sobre la actualidad de nuestro país. En el último, de este miércoles, Carmen Lomana asegura que «mientras siga habiendo tantos disparates voy a hacer una pildorita de lo que está pasando», explica la colaboradora de televisión, impactada ante las últimas noticias. En este caso, ha querido tratar la sonada dimisión del alcalde de Badalona, Álex Pastor.
«Me he quedado a cuadros con lo del alcalde del PSOE de Badalona, ¿será posible que podamos tener en nuestros ayuntamientos semejante gentuza?», se ha preguntado, muy indignada. «Este tío sale por la noche borracho como una cuba, saltándose todo lo habido y por haber…» ha relatado Lomana, sorprendida por el esperpéntico suceso.
«Este señor tiene un problema, de alcoholismo, de drogas o algo»
La mediática experta en protocolo estaba particularmente indignada porque el político, al tener que dar la documentación a la policía, les diese la «documentación de alcalde». Lomana criticó que Álex Pastor contestase a los policías: «¿No sabe usted quién soy yo?», y quiso saber cuánto de multa le anotaron. Además, se mostró aterrorizada ante el hecho de que se «liase a patadas y a mordiscos como un perro rabioso».
CARMEN LOMANA LE TILDA DE «BESTIA PARDA»
«Me gustaría saber cuánto ha pagado de multa», asegura Lomana, en contexto de las sanciones que se están poniendo al resto de la población cuando alguien «sale a correr» o se salta de alguna manera el confinamiento. «Yo le hubiera dejado aunque sea como castigo una semana encerradito», incide. «Este señor tiene un problema, de alcoholismo, de drogas o algo, porque para liarse a mordiscos hay que ser una bestia parda«, aseveró la empresaria.
Tras estas reflexiones, Carmen Lomana se alegró de la rectificación del Gobierno por la que ahora los pequeños van a poder salir de casa a pasear. Lomana se había mostrado anteriormente muy preocupada por la situación de este grupo de la población, tal y como explicó en anteriores vídeos. «Los niños que estaban demonizados, ahora en España no […] Gracias a Dios los niños pueden salir y no al supermercado»