Su nombre es Mildomio Adames y ha tenido el dudoso honor de provocar una aglomeración de miles de personas en Puerto Plata, República Dominicana. Esto, habría puesto en riesgo de continuar contagiando de forma virulenta de coronavirus al país caribeño.
Adames habría iniciado una peregrinación a través del país, portando una cruz, para llevarla al mar. Mildomio habría tenido una revelación divina. Esta le indicaba que si deposita dicha cruz en el mar, Dios acabaría con la pandemia del Covid-19.
Antes de llegar a Puerto Plata, los seguidores de este falso profeta habrían irrumpido en la catedral San Felipe Apostol. El templo ha sido asaltado por la fuerza pues estaba cerrado como medida para frenar la pandemia. De hecho, las autoridades religiosas del país se han desmarcado de este hecho. Lo mismo han hecho las autoridades políticas nacionales y locales que han puesto el grito en el cielo por lo que les parece un acto de irresponsabilidad absoluta.
La aglomeración también ha causado el enfado y la condena de millones de dominicanos, que ven en gestos como este, una sinrazón que pone en peligro al resto de la población que está realizando de forma responsable la cuarentena.
A pesar de que en República Dominicana hay menos de 300 fallecidos debido al coronavirus el país se encuentra en estado de excepción hasta el 30 de abril. Fuentes oficiales ya han informado de la intención de prorrogarla por 25 días más.