Entre la prudencia y el caos: La contradictoria desescalada amenaza la recuperación

  • El PIB se ha caído en lo que llevamos de año un 5,2%, la mayor caída en décadas.
  • Algunos economistas avisan de que se podría llegar a una caída del 22%.
  • El equilibrio entre la prudencia de la desescalada y la reapertura económica marca el plan del Gobierno.
  • La economía española se ha desplomado un 5,2%. Pero no ha pillado a nadie por sorpresa. Sin embargo, el plan de desescalada propuesto por el Gobierno, además de estar plagado de enormes contradicciones, siembra tantas dudas e incertidumbre sobre cómo será la vuelta a la normalidad que la mayoría de las empresas y algunos economistas, como Daniel Lacalle, consideran que las consecuencias para el Producto Interior Bruto serán más duras de lo esperado. Hasta el punto de que habrá cientos de miles de empresas que echarán el cierre.

    Es un ejemplo, pero que se permita hacer surf a partir del 2 de mayo pero no ir a las playas es un buen resumen de las contradicciones que presenta el plan de desescalada del Gobierno. Es evidente que es complicado elaborar un plan que sea tan coherente como se espera en un país de más de 46 millones de habitantes, pero las respuestas y las medidas que se ha dado al pequeño comercio no son nada alentadoras. Y la respuesta de la vicepresidenta Teresa Ribera menos, cuando ha dicho que «el que no se sienta cómodo, que no abra».

    Los gráficos son tremendos. Es la mayor caída del PIB en décadas. «El que no se sienta cómodo, que no abra». El gobierno dando soluciones eficaces a las empresas mientras se hunde la economía, ha afirmado el economista Daniel Lacalle a la vez que compartía un gráfico muy ilustrativo sobre la evolución de la economía del país.

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    Las dudas del plan de desescalada han llevado incluso a que las peluquerías no sepan si podrán abrir este lunes o no. Los propietarios de este tipo de negocios ya han recibido llamadas para hacer reservas, pero no lo tienen claro. Nada claro. De hecho, este modelo que prevé que mediante cita previa y con limitación de aforo se empiecen a reabrir los comercios tampoco es rentable, al menos no para la mayoría de pequeños empresarios, que ven cómo pierden dinero al abrir y poder contar con tan poca afluencia de clientes.

    Tal es el desconcierto que ha despertado el plan de desescalada del Gobierno, que incluso ha llevado a situaciones extrañas criticadas por los propios socios de Pedro Sánchez, como el portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya Gabriel Rufián. Se podrá ir a una terraza a tomar una cerveza con límite de aforo desde el 11 de mayo si todo va bien. Sin embargo, no se podrá ir a casa de un amigo o de algún familiar. Todo un sinsentido para algunos políticos.

    «El PIB en España podría caer un 22% en el segundo trimestre. Incluso si la economía se recupera en la segunda mitad de 2020, el PIB caería entre un 11-12% anualizado en todo el año, un colapso sin precedentes recientes. El Gobierno debe rectificar YA», ha comentado Lacalle.  «Se van a cerrar de 70.000 a 90.000 negocios de restauración como no se reaccione de forma rápida. Hay que crear garantías económicas», ha asegurado en una entrevista en la Cope Octavio Llamas, CEO de una empresa de auditoría de hostelería.

    Entre tanto, a finales de este mes el Gobierno espera aprobar la renta mínima para paliar las consecuencias de la crisis. Por el momento es un 5% del PIB, pero desde el Banco de España se estima que se llegará a un 13% al final del 2020. Y desde el FMI, los resultados no son especialmente mejores, ya que creen que perderá hasta un 8%.

    El Gobierno tiene una tarea difícil. Tanto que la precisión es clave porque tiene que hacer malabares entre las precauciones para evitar que haya una segunda oleada de infectados por coronavirus y para no acabar con la economía del país. El Ejecutivo es consciente de que el plan de desescalada es interpretable desde todos los ángulos. Tanto, que incluso el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha dejado claro que el Gobierno está dispuesto a escuchar y a rectificar, tal y como hizo con el relajamiento del confinamiento para los niños.

    Todos esperaban desde el Ejecutivo que la economía se iba a desplomar estos meses, pero sigue vigente la esperanza de la recuperación en V, es decir, que el PIB suba tan rápido como bajó, pero las estimaciones de organismos internacionales y nacionales, así como las de los economistas apuntan a que, como mucho, será en forma del símbolo de la marca de deportes Nike. Y en el peor de los casos, podría caer hasta un 22%, es decir, que sería la mayor caída de la historia de España desde que ha habido registros. Un desastre sin precedentes.